lo esencial
El domingo, la joven aveyronnaise estará en Roma para participar en el prestigioso concurso europeo de la Confederación Nacional de Danza.
Para ella, es la secuencia lógica de los acontecimientos. Con sólo 13 años, Emma Gasq ya tiene todo lo que necesita para ser adulta. Originaria de Bournazel, la joven aveyronnaise se destaca en la danza, ¡y sus actuaciones lo reflejan bien! El año pasado se distinguió en el concurso regional y luego nacional de la Confederación Nacional de Danza (CND), ¡lo que le otorgó el derecho a competir a nivel europeo!
Así, el domingo, acompañada de su familia y de su profesora de danza, la rutena Camille Legray, estará en Roma para participar en este concurso. “¡Estoy tan feliz!”ella sonrió. No en vano, en su categoría (danza clásica menores de 13 años), sólo otra francesa subirá al escenario, para un total de unos cuarenta competidores procedentes de Italia, España, Bélgica… En el programa, una variación, o Se impone una coreografía a todos los participantes, luego el jurado otorga una puntuación al final del pasaje.
Un sueño: la Ópera de París
En cualquier caso una cosa es segura: para Emma, bailar es una obviedad. “Incluso en casa, cuando le pedimos que traiga algo, baila todo el tiempo”se ríe Vanessa Gasq, su madre, que le transmitió esta pasión y ahora la acompaña. Fue a los cuatro años cuando descubrió esta actividad, probando lo contemporáneo, antes de optar por lo clásico tres años después. Asistida a un internado en el colegio Fabre de Rodez, la alumna de cuarto grado se dedica a esta tarea. Ya que todos los días, de lunes a viernes, entrena durante 2 horas con su profesora. “Cuando baila da una hermosa impresión de soltura, hay que destacar su trabajo es muy importante el rigor y la disciplina”felicita Camille Legray. Un pequeño evento también para ella. Porque si ya participó en este concurso como bailarina, esta será la primera vez que irá allí con uno de sus alumnos como profesora. “¡Lo acompañaré detrás del escenario!”especifica.
Entonces, el objetivo para Emma es simple: unirse a una importante escuela de danza el próximo año. ¿Su sueño? “La Ópera de París”ella no se esconde. Una misión en la que su profesora de danza pretende implicarse lo más posible. Primer paso, ¡triunfa en esta competición en Roma!