Debatida durante siglos, la autoría de la obra maestra “Madonna della Rosa”, atribuida al pintor italiano Rafael, vuelve a ser cuestionada. Una IA analizó la mesa revelando detalles nunca antes vistos.
¿Y si Rafael no hubiera pintado por completo la Madonna della Rosa? Esta es la pregunta que ahora arde en labios de los expertos tras el descubrimiento de una… ¡IA! Durante mucho tiempo, los expertos han debatido sobre la autenticidad de la obra maestra, expuesta en el Museo del Prado de Madrid, como obra original de Rafael. Y este reciente descubrimiento está alimentando el debate actual.
En un estudio publicado en la revista Heritage Science, investigadores británicos y estadounidenses explicaron que habían desarrollado un algoritmo de análisis personalizado basado en las obras autenticadas de Rafael. El algoritmo se basó en una arquitectura previamente entrenada de Microsoft y una técnica de aprendizaje automático llamada “Support Vector Machine”, que previamente había mostrado una alta precisión en la identificación de obras de Raphael.
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“A través de un extenso análisis de características, utilizamos imágenes de pinturas autenticadas de Raphael para entrenar a la computadora para que reconozca su estilo con gran detalle, desde las pinceladas, la paleta de colores, las sombras y todos los aspectos de la obra de arte”.explica Hassan Ugail, matemático e informático de la Universidad de Bradford, Reino Unido, y autor principal del estudio.
¿Un alumno de Raphaël, coautor de la obra maestra?
Así, esta inteligencia artificial fue programada para reconocer el estilo distintivo del pintor italiano. Al analizar el cuadro “Madonna della Rosa” (“La Virgen de la Rosa”), la IA reveló algunos de los detalles ocultos en el rostro de San José. Detalles que sugieren que Raphaël no habría pintado esta parte del cuadro.
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De hecho, en el cuadro, la Virgen, el Niño y San Juan parecen haber sido pintados por Rafael. Sin embargo, el rostro de San José tiene diferencias en la pincelada que llevan a la IA a determinar que otra persona habría pintado esa parte.
Algunos expertos creen que el segundo pintor podría ser Giulio Romano, alumno de Rafael. Una hipótesis que actualmente es imposible de confirmar. Sin embargo, este descubrimiento subraya la creciente importancia que la inteligencia artificial puede tener en el análisis y la atribución de obras de arte históricas cuya autoría aún no está clara.
