“En caso de amenaza de accidente especialmente grave” (que ponga en peligro vidas humanas o infraestructuras críticas, por ejemplo), el ejército estará ahora autorizado a repeler los drones “que vuelen ilegalmente”, precisa el ministerio.
“La condición previa es que las fuerzas policiales, en principio competentes (…) no estén técnicamente capacitadas para hacerlo y soliciten ayuda” del ejército, añade.
En los últimos meses, una serie de sobrevuelos no resueltos sobre su territorio han puesto en alerta a Alemania.
Alemania investiga posible espionaje ruso en zona militar en el emplazamiento del Eurofighter
Máquinas sofisticadas
El lunes, las autoridades anunciaron que estaban investigando el vuelo, de al menos diez drones, de la zona militar de la planta de fabricación de aviones de combate Eurofighter, en Manching, al norte de Múnich.
Anteriormente se habían producido otros sobrevuelos no resueltos en este emplazamiento de Airbus Defence and Space, así como en el emplazamiento militar de Neubour-sur-le-Danube, situado no lejos de allí.
Ante dispositivos cada vez más sofisticados, la policía alemana no siempre dispone de los medios adecuados para intervenir.
La tecnología avanzada de muchos drones detectados recientemente “plantea a las autoridades policiales desafíos cada vez mayores”, observan las autoridades alemanas.
Estos modelos con características de vuelo sofisticadas, “cuyo rendimiento supera con creces el de los drones disponibles comercialmente”, “pueden utilizarse en nombre de agencias estatales extranjeras”.
“Los drones, como instrumento de espionaje y sabotaje, pueden representar un peligro real, en particular para nuestras infraestructuras críticas”, subrayó el Ministro del Interior.
El proyecto de ley, que fue adoptado por el Consejo de Ministros el miércoles, implica una enmienda a la ley de seguridad aérea, aún debe ser adoptado por la cámara baja del parlamento alemán, el Bundestag.
El portavoz del Gobierno, Steffen Hebestreit, se mostró confiado en que este texto sea aprobado en el Bundestag antes de las elecciones anticipadas del 23 de febrero, aunque el Gobierno del socialdemócrata Olaf Scholz esté ahora en minoría.
Alemania: vuelos de drones no identificados sobre lugares sensibles
Sitios militares e industriales
Alemania, el principal apoyo de Ucrania después de Estados Unidos en el ámbito militar, está particularmente en la mira de Moscú.
Su proximidad a Rusia (Berlín está a poco más de 500 kilómetros en línea recta del enclave de Kaliningrado) la hace aún más vulnerable.
Sobre todo porque el uso de drones con fines militares ha aumentado desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia, ya sea como arma de guerra entre los dos países beligerantes, o como arma de espionaje en el marco de la “guerra híbrida” que Occidente acusa a Moscú de emprender.
En agosto, los drones sobrevolaron durante varios días seguidos una zona industrial en Brunsbüttel (norte), incluida una central nuclear parada y una terminal de gas natural licuado.
En diciembre se realizaron sobrevuelos nocturnos en el oeste de Alemania, sobre el complejo químico de BASF en Ludwigshafen, las instalaciones del grupo Rheinmetall, uno de los mayores fabricantes de armas de Europa, y la base aérea estadounidense de Ramstein.
En todos estos casos se abrieron investigaciones policiales.
En Estados Unidos, los informes sobre drones o dispositivos voladores no identificados, reportados por residentes de las regiones de Nueva York o Nueva Jersey, aumentaron en diciembre, preocupando a la opinión pública.
Las autoridades estadounidenses han descartado cualquier riesgo para la seguridad nacional o pública y han descartado cualquier sugerencia de participación.
