(Jerusalén) El gobierno israelí aprobó el domingo un proyecto destinado a duplicar la población en la parte del Golán sirio anexada por Israel, pero dice que no tiene ningún interés en entrar en conflicto con Siria, después de tomar el control de la zona de amortiguación vigilada por el NACIONES UNIDAS.
Publicado a las 6:18 a.m.
Michael BLUM
Agencia France-Presse
Apenas unas horas después de la caída, el 8 de diciembre, del presidente sirio Bashar al-Assad, expulsado del poder por los rebeldes, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenó al ejército que se apoderara de esta zona de amortiguación controlada por la ONU que separa los dos países en el Golán. Alturas.
Un responsable de la ONU en Nueva York confirmó a la AFP que las fuerzas de paz “observaron una serie de incidentes diarios en los que el ejército israelí opera al este de la zona de amortiguamiento”.
El domingo, el gobierno israelí aprobó “por unanimidad” el proyecto de Netanyahu para el “desarrollo demográfico de las localidades del Golán y [la ville de] Katzrin por una suma de 40 millones de shekels (15,83 millones de dólares canadienses), en vista de la guerra y del nuevo frente en Siria y del deseo de duplicar la población del Golán”, según un comunicado de su oficina.
“Esta es una decisión que fortalece las localidades del Golán y el Estado de Israel”, añade el comunicado. Al mismo tiempo, Netanyahu subrayó que su país no quería entrar en conflicto con Siria.
“No tenemos ningún interés en enfrentarnos a Siria; definiremos la política de Israel hacia Siria basándonos en la realidad sobre el terreno”, dijo en un vídeo difundido por su oficina.
“Hoy en día, todo el mundo comprende la importancia crítica de nuestra presencia en el Golán, y no al pie del Golán”, que domina las colinas de Galilea y el lago Galilea en el norte de Israel, dijo Netanyahu.
Alrededor de 30.000 ciudadanos israelíes viven en 34 localidades del Golán anexionado por Israel, a los que se suman 23.000 drusos, una comunidad cuya religión proviene del Islam, que en su mayoría afirman ser sirios aunque tienen el estatus de residentes en Israel.
Israel conquistó parte del Golán, en el suroeste de Siria, durante la guerra árabe-israelí de 1967, antes de anexar el territorio en 1981. Sólo Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, reconoció esta anexión en 2019.
“Por la eternidad”
Arabia Saudita condenó el domingo el plan del gobierno israelí de duplicar la población en la parte ocupada por Israel del Golán sirio, denunciando “el continuo sabotaje de las oportunidades para restablecer la seguridad y la estabilidad en Siria” tras la caída de Assad.
Por su parte, Qatar deploró “un nuevo episodio de la serie de agresiones israelíes contra territorios sirios y una flagrante violación del derecho internacional”.
La semana pasada, Netanyahu declaró que el Golán anexado sería israelí “por la eternidad”.
El ejército israelí también se apoderó de zonas más allá de la zona de amortiguación. Israel presentó la acción, que provocó la condena internacional, como una medida temporal y defensiva.
En el proceso, el Ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ordenó a las tropas que “se prepararan para permanecer” en la zona de amortiguación durante todo el invierno.
En una declaración en video el domingo después de una llamada telefónica con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, Netanyahu dijo que Siria había atacado a Israel en el pasado y había permitido que otros, incluido el Hezbollah libanés, lo hicieran desde su territorio.
“Para garantizar que no se repita lo ocurrido en el pasado, hemos tomado una serie de medidas intensivas en los últimos días”, afirmó. “En cuestión de días, destruimos las capacidades que el régimen de Assad había construido durante décadas”, añadió.
El ejército israelí atacó “violentamente” numerosas instalaciones militares en la costa siria durante la noche del domingo al lunes, afirmó una ONG, ataques que provocaron el pánico entre los residentes, según un periodista de la AFP.
“Aviones de combate israelíes lanzaron ataques” contra varios sitios, incluidas unidades de defensa aérea y “depósitos de misiles tierra-tierra”, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
La ONG afirma que se trata de “los ataques más intensos desde 2012” en la región costera de Tartus (oeste), que alberga una base naval rusa.
Desde la captura de Damasco por una coalición armada que derrocó a Bashar al-Assad el 8 de diciembre, 473 ataques israelíes han tenido como objetivo sitios militares en toda Siria, dijo el lunes el OSDH.
En el pueblo de Bmalkah, en las alturas de la ciudad de Tartous, las carreteras están llenas de cristales rotos. En los huertos, la explosión de los bombardeos arrancó las hojas de los olivos y un humo espeso se elevó de las colinas circundantes, constató la AFP.
“Comenzó poco después de la medianoche y continuó hasta las 6 a.m. (10 p.m. hora del este). Fue como un terremoto. Todas las ventanas de mi casa explotaron”, dice Ibrahim Ahmed, un empleado de 28 años de un bufete de abogados.
“El pueblo no durmió en toda la noche. Los niños lloraban. Ya no quedan ventanas en las casas”, afirma un hombre que no quiso dar su nombre.