Los rebeldes islamistas sirios continúan su deslumbrante avance este sábado 7 de diciembre a las puertas de Homs, la gran ciudad del centro del país, mientras las fuerzas gubernamentales refuerzan las líneas del frente y bombardean las posiciones de los insurgentes, intentando salvar el régimen del presidente. Bashar al Assad, en el poder desde hace 24 años.
El régimen de Bashar al Assad, en el poder en Siria desde hace 24 años, parece flaquear este sábado 7 de diciembre, mientras los rebeldes yihadistas continúan su avance. Durante un tiempo circularon informaciones según las cuales el presidente sirio había abandonado el país, informaciones posteriormente desmentidas, añadiendo que Assad “continuaba su trabajo y sus deberes nacionales y constitucionales desde la capital”, Damasco.
¿Damasco listo para caer?
Damasco, según las ONG, los rebeldes se acercan a ella. Según informes, el ejército sirio se retiró el sábado de sus posiciones en localidades situadas a unos 10 kilómetros al suroeste de la capital, información una vez más desmentida por el Ministerio de Defensa del país. Al mismo tiempo, “nuestras fuerzas han iniciado la fase final del cerco de la capital, Damasco”, afirmó un alto comandante de la coalición rebelde, Hassan Abdel Ghani. En los suburbios de la capital, manifestantes hostiles al régimen derribaron una estatua de Hafez al-Assad, el padre del actual presidente.
Rusia e Irán apoyan al régimen
Bashar al Assad ha contado durante mucho tiempo con sus aliados para repeler a los rebeldes islamistas, en particular con apoyo aéreo de aviones rusos, mientras que Irán ha movilizado fuerzas aliadas, en particular el Hezbollah libanés y las milicias iraquíes, para apoyar al ejército sirio y atacar los bastiones insurgentes. Al menos siete civiles murieron este sábado en ataques rusos y sirios cerca de Homs.
Pero con la guerra en curso en Ucrania, que comenzó en febrero de 2022, Moscú ahora debe centrarse en este conflicto y sólo puede proporcionar una ayuda “mínima” a Bashar al Assad. Y esto incluso si el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, cree este sábado que el territorio sirio no puede caer bajo el control de “terroristas”.
Del lado iraní, la ayuda también se ve debilitada, mientras que varios líderes de Hezbollah han sido asesinados este año en el conflicto con Israel. Como prueba de que la situación se ha vuelto delicada para el régimen sirio, Teherán estimó este sábado que era necesario un “diálogo político” entre el Gobierno sirio y la oposición, tras una ofensiva rebelde sin precedentes.
Estados Unidos en submarino
Estados Unidos también desempeña un papel en el caos militar en Siria, aunque unos minutos antes de su reunión con Emmanuel Macron en París, Donald Trump escribió que Washington no debería interferir en la situación de este país. “Siria es un desastre, pero no es nuestro amigo, y Estados Unidos no debería tener nada que ver con eso. Esta no es nuestra lucha”.
Sin embargo, Estados Unidos apoya a otros rebeldes, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) lideradas por los kurdos, que están tomando medidas en el caos actual. Este viernes 6 de diciembre tomaron el control de Deir Ez Zor, localidad también evacuada por el ejército, según varias fuentes. Una segunda ciudad, Alboukamal, situada en la frontera con Irak, también cayó en manos de las FDS.
Cientos de miles de desplazados
La ONU anunció este viernes 6 de diciembre que 280.000 personas habían sido desplazadas desde el 27 de noviembre para huir del caos, informa France Info. El Programa Mundial de Alimentos, organismo de la ONU, recuerda que miles de libaneses huyeron a Siria para evitar los ataques israelíes. “Si la situación continúa evolucionando al ritmo actual, colectivamente esperamos que alrededor de 1,5 millones de personas sean desplazadas”. comentó su director de coordinación de emergencias, Samer AbdelJaber.