Dos pesos pesados de los hidrocarburos, la británica Shell y la noruega Equinor, fusionarán sus activos en el Reino Unido para crear una entidad propiedad a partes iguales de los dos grupos, anunciaron el jueves.
Con sede en Aberdeen, Escocia, la nueva empresa será el “mayor productor independiente” en aguas británicas del Mar del Norte, dijeron los dos grupos en un comunicado conjunto.
Combinando los 38.000 barriles de petróleo equivalente por día (bep/d) producidos por la filial británica de Equinor y los 100.000 boe/d de Shell, tendrá una producción total de unos 140.000 boe/d.
Este volumen sigue siendo relativamente limitado en comparación con la producción total de los dos gigantes: Equinor, por ejemplo, bombea hoy casi 2 millones de boe/d en todo el mundo.
Con los campos del Mar del Norte madurando y la producción disminuyendo, los dos grupos señalan que la combinación de activos permitirá “la explotación rentable continua de este recurso vital para el Reino Unido”.
A pesar de la brecha entre las respectivas producciones, el compromiso no resultará en el desembolso de efectivo por parte de Equinor, indicó un portavoz del grupo noruego.
“También hay proyectos en curso en la cartera que tienen un valor significativo, por ejemplo (el campo de petróleo y gas Rosebank)” en el Mar del Norte, dijo Ola Morten Aanestad al periódico noruego Dagens Naeringsliv (DN).
“Así que no habrá intercambio de dinero en efectivo”, dijo.
Las filiales británicas de Equinor y Shell emplean actualmente a unas 300 y 1.000 personas respectivamente.
Según un analista noruego, la nueva entidad, que debería nacer el 1 de enero de 2025, podría finalmente cotizar en bolsa.
“La rentabilidad es mala en el Reino Unido y está empeorando”, dijo John Olaisen, analista de ABG, al sitio de noticias empresariales e24.no.
“Los márgenes son reducidos y los impuestos altos”, argumentó.
En el Reino Unido, Equinor conservará sus propios campos transfronterizos (Noruega-Reino Unido) en el Mar del Norte, así como sus activos en energía eólica marina y otras energías renovables.
Shell, por su parte, seguirá siendo propietaria de su planta de gas natural licuado en Fife, de la terminal de gas de St Fergus en Escocia y de sus proyectos eólicos marinos en desarrollo.