Durante más de una semana, el canguro Sammy mantuvo en vilo no sólo a los habitantes del valle de Müllerthal, sino también a todo el país. Después de escapar de su casa cerca de Consdorf, fue visto varias veces en la N11 entre Michelshof y Echternach. El miércoles por la noche llegó la buena noticia: el marsupial fue capturado y llegó sano y salvo a su dueño.
Así lo confirmó el jueves por la mañana Daniel Frères, de la organización protectora de animales Danos una voz: “Amigos de la familia vieron al canguro esa misma noche cerca de Consdorf, lo rodearon y lo capturaron”. En total, se dice que en la operación participaron cinco personas, y él también se encontraba allí. Sin embargo, hay una afirmación interesante: “No puedo decir más. Este es ahora un asunto en curso, que probablemente terminará en los tribunales”.
Aún no está claro si esto se debe únicamente a la autorización que todavía falta a día de hoy. Lo cierto es que Sammy y los otros dos canguros fueron detenidos sin la autorización necesaria. A este respecto, en los últimos días se ha planteado la cuestión de si los animales podrían seguir viviendo con sus dueños o no. Una cuestión que ha quedado resuelta, al menos de momento.
La inspección veterinaria visitó el lugar.
De hecho, Sammy está una vez más en su propio recinto. Como RTL Como se anunció este jueves, el animal fue incautado oficialmente por las autoridades, ya que el propietario no tiene autorización para tenerlos. El director de inspección veterinaria, Felix Wildschutz, explicó a RTL que la mujer ahora debía solicitar autorización a posteriori y presentar un expediente ante el Ministerio de Agricultura. En este último caso tendrá que demostrar que puede criar al canguro de acuerdo con las necesidades de la especie. Sobre la base de este expediente, la inspección veterinaria elaborará un dictamen. Pero será el Ministerio de Agricultura el que tendrá la última palabra.
Según Felix Wildschutz, por ahora todo está yendo bien para el propietario y los ualabíes. La inspección veterinaria ya ha visitado el lugar para hacerse una idea. A primera vista, todo cumpliría los requisitos: el terreno es bastante grande, los animales tienen comida y refugio. Por tanto, parece que los animales pueden quedarse en casa y que se les puede expedir una autorización. “Queremos aclarar la situación lo antes posible”, continúa Felix Wildschutz.
Este artículo se publicó originalmente en el sitio web de Luxemburger Wort.
Adaptación: Simón Martín
