“Me quedé muy impresionado”. Unos minutos después de su encuentro con el Papa Francisco, Manu Payet cruza la larga galería lapidaria del Vaticano que alberga una rica colección de antigüedades. El humorista, que recuerda haber asistido a la misa de Juan Pablo II durante su viaje a la Isla de la Reunión en 1989, no habría faltado a esta mañana por nada del mundo. Invitado por el Vaticano a escuchar al Papa Francisco dar un discurso sobre el humor, aprovechó para traer a su madre desde la Isla de la Reunión. “Tuve la oportunidad de hacer el regalo que muchos hijos quisieran hacer a su madre”, confió a algunos periodistas franceses en Roma. Con él ofreció un pequeño cuadro representativo de su isla que el pontífice argentino comentó con una amplia sonrisa. “Después ya no lo sé, estaba borroso”, dice Manu Payet, todavía conmovido.
Durante la audiencia, el Papa Francisco insistió en la belleza del oficio de comediante. “Cuando logras traer sonrisas inteligentes a los labios de un solo espectador, también le traes una sonrisa a Dios”, aseguró. ¿Hacer reír a Dios? “En cualquier caso, a veces esperaba que se hubiera reído”, murmura el actor, que también coincide con el Papa cuando éste asegura que se ha vuelto más fácil hacer tragedia que comedia.
“Las noticias de hoy no dan ganas de reír”, subraya. “A veces tienes que ir a trabajar, hacer tu programa. Y luego, si enciendes un canal de noticias, ya no querrás volver allí. ¡Pero es entonces cuando tenemos que ir aún más!”, continúa feliz de que el Papa reconozca y anime a los artistas. “Hubo un tiempo en el que hacer reír no se recibía así”, asegura. Por eso, para el comediante de 48 años era importante venir al Vaticano para “saludar” y “celebrar la modernidad de este Papa”.
Junto a numerosos artistas italianos y americanos, como Chris Rock, Whoopi Goldberg o los presentadores Stephen Colbert y Jimmy Fallon, Manu Payet pudo escuchar la oración que el Papa recita cada día desde hace 40 años, la de Santo Tomás Moro: “Dad Señor, sentido del humor”. Una oración que sin duda el humorista francés traerá de Roma.
