A sus 38 años, Rafael Nadal acaba de retirarse. Sin embargo, el as del tenis todavía puede contar con una sólida cartera de inversiones y acuerdos de patrocinio.
Artículo de Brett Knight para Forbes EE. UU.
España se enfrentó a Holanda en los cuartos de final de la Copa Davis esta semana, marcando el último partido de Rafael Nadal como tenista profesional. El mes pasado, la superestrella de 38 años anunció en un emotivo vídeo publicado en las redes sociales que se retiraría después del torneo, 19 años después de ganar su primer título de Grand Slam y 25 años después de firmar su primer acuerdo de patrocinio con Nike.
Una carrera exitosa
Durante esta larga y exitosa carrera, Nadal ha disfrutado de más éxito que casi todos los tenistas profesionales. Sus 22 títulos individuales de Grand Slam establecieron un récord masculino, desde entonces superado por Novak Djokovic, y sus ganancias profesionales de 134,9 millones de dólares lo colocan en segundo lugar en el ranking de ganancias del ATP Tour, nuevamente detrás del serbio. Rafael Nadal también ganó más de 415 millones de dólares por acuerdos de patrocinio, apariciones y otras actividades comerciales, para un total de más de 550 millones de dólares en ingresos antes de impuestos, según estimaciones de Forbes.
Esto le deja muy por detrás de los 1.100 millones de dólares que su otro gran rival, Roger Federer, acumuló durante su extraordinaria carrera antes de retirarse en 2022. Además, estas ganancias le sitúan más o menos a la altura de Djokovic, que sigue prosperando en el circuito a sus 37 años. . Sin embargo, ningún otro tenista y pocos deportistas de alto nivel se acercan a las alturas alcanzadas por el español. Incluso Serena Williams, que ganó 23 títulos individuales de Grand Slam y ayudó a establecer un nuevo estándar para la compensación de las deportistas antes de abandonar las canchas en 2022, terminó a unos 120 millones de dólares de Nadal.
“Creo que sigue obteniendo avances”dice un agente de tenis sobre Nadal, quien ganó alrededor de 23 millones de dólares en ingresos extradeportivos durante el año pasado. “Él no hace nada si no gana mucho dinero. Queda Rafa Nadal. »
Si bien no ha cambiado del todo el juego del marketing como Federer (uno de los siete atletas que han superado los mil millones de dólares en ganancias profesionales) o Serena Williams (que se convirtió en una de las mujeres hechas a si mismas los más ricos de Estados Unidos, con una fortuna que Forbes estimado hoy en $340 millones), Rafael Nadal ha mantenido una sólida cartera de patrocinios que también es inusualmente estable para los estándares del tenis, donde los jugadores a menudo cambian de socios de marca.
Además de su larga relación con Nike, Nadal está vinculado a Kia desde 2004, un año antes de su espectacular victoria en Roland Garros, y juega con raquetas Babolat desde los nueve años, firmando su primer contrato internacional con la compañía. en 2001. Compró relojes Richard Mille en 2010 y la empresa española Telefónica en 2014. Infosys, Louis Vuitton y Subway se encuentran entre las incorporaciones más recientes. a un portafolio que incluye más de una docena de marcas.
“Muchos de estos contratos los firmó mientras estaba lesionado y eso dice mucho de su marca”dice Joe Favorito, consultor de marketing desde hace mucho tiempo y ex ejecutivo del WTA Tour. “Nadie huyó. »
Una imagen de marca en España y en el mundo
En los primeros años, el inglés algo vacilante de Nadal puede haber limitado su atractivo global, pero comenzó a atraer a los especialistas en marketing alrededor de 2011, cuando cruzó por primera vez la marca de los 20 millones de dólares de ingresos extradeportivos después de ganar cuatro torneos importantes en cinco intentos. “Lo único que poseía Rafa más que nadie era su emoción, que no ocultaba”dice Joe Favorito, quien también señala que el sentido de la moda de Nadal, hasta el color de sus zapatos, lo hizo reconocible al instante. Los patrocinadores se sintieron particularmente atraídos por su batalla en curso con Federer, y los torneos más pequeños estaban dispuestos a pagar a cada uno de ellos más de $1 millón en honorarios de aparición solo para presentarse.
“Roger era más una estrella clásica y elegante, mientras que Rafa era más un rival combativo que lucía una camiseta sin mangas y cabello largo mediterráneo, y creo que se adaptaban muy bien el uno al otro”.dice Stuart Duguid, cofundador de la agencia de talentos Evolve, que representa a las estrellas actuales Naomi Osaka y Nick Kyrgios. “No creo que la carrera de una persona hubiera podido desarrollarse sin la de la otra, en muchos sentidos. »
Y Nadal está a otro nivel en su España natal. “Probablemente sea más importante que LeBron James en Estados Unidos”afirma Stuart Duguid, quien señala que Nadal se ha beneficiado de una visibilidad constante que la mayoría de las otras estrellas del país, procedentes de deportes de equipo, nunca han podido tener. Joe Favorito, que recuerda haber visto a Nadal en una reunión anterior de la Copa Davis en España, es aún más conciso sobre su lugar en el panteón del país: “Él es un verdadero dios. »
Una jubilación que promete ser fructífera
Se espera que muchos, si no todos, los patrocinadores de Nadal sigan apoyándolo durante su retiro. Ya ha demostrado que puede ser un buen vendedor cuando no juega; las lesiones lo han limitado a nueve torneos en las últimas dos temporadas, incluidos sólo dos de los últimos ocho Grand Slams, y la experiencia de Federer es instructiva. La leyenda suiza de 43 años todavía ganaba alrededor de 95 millones de dólares al año cuando se retiró del tenis y continúa trabajando con la gran mayoría de sus socios desde sus días en las canchas.
La jubilación también tiene una ventaja para los especialistas en marketing. Los jugadores activos, que trabajan durante todo el año en torneos de tenis, suelen intentar concentrar todos sus compromisos con la marca en unos pocos días. Ahora Nadal tiene mucho más tiempo para relacionarse con sus socios, si así lo desea.
Ésta es una advertencia importante. Nadal tendrá que esforzarse por mantenerse en el centro de atención, como Tom Brady y David Beckham, o correr el riesgo de convertirse en el próximo Pete Sampras, eclipsado por una nueva generación de grandes del tenis. Jannik Sinner y Carlos Alcaraz ya están sentando las bases de una rivalidad que marcará su época, con seis títulos de Grand Slam entre ellos antes de que ninguno de los dos cumpla 24 años.
Nadal también necesitará mantener su reputación, habiendo dado quizás el primer paso en falso de su carrera al convertirse en embajador de la Federación Saudita de Tenis en enero. Se espera que el contrato le reporte varios millones al año, pero sus fanáticos, particularmente en España, lo han acusado de participar en una campaña de blanqueo deportivo que distrae la atención de las pasadas violaciones de derechos humanos cometidas en el Reino.
Un cambio empresarial
Sin embargo, Nadal también está tomando las riendas de su destino a través de actividades más empresariales, tomando participaciones en empresas y lanzando sus propios negocios. Recientemente invirtió en Playtomic, una startup que ayuda a los tenistas aficionados a reservar su tiempo en las canchas. Además, según se informa, está desarrollando residencias de lujo en la Costa del Sol, en España. Es propietario de un equipo de regatas de barcos eléctricos de la serie E1 y de los restaurantes Tatel junto a Pau Gasol y Cristiano Ronaldo, y se asoció el año pasado con los hoteles Meliá para crear una marca de resort llamada Zel.
También dirige una academia de tenis en su ciudad natal, Manacor, en la isla española de Mallorca, que ha ganado admiradores en todo el mundo del deporte y ayudó a entrenar a Casper Ruud, ahora uno de los 10 principales de la ATP.
“No creo que esta opción sea accesible para la mayoría de los deportistas. De hecho, está reservado a los deportistas de élite o especialmente importantes”.dice Stuart Duguid sobre el enfoque empresarial en evolución de Nadal, que pone menos énfasis en los acuerdos de patrocinio tradicionales. “Creo que probablemente se esté inspirando en Kobe y LeBron y otros así que fueron capaces de tomar posiciones en empresas y riesgos que terminaron siendo diez veces o más rentables con el tiempo. »
Una traducción de Flora Lucas.
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