Un tribunal federal estadounidense remitió el viernes a los tribunales del estado de Pensilvania la lotería de un millón de dólares lanzada por Elon Musk que premia diariamente a un votante estadounidense en un estado clave.
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El jefe de SpaceX, Tesla y Harris.
La operación, impugnada ante los tribunales por la fiscalía de Filadelfia, principal ciudad de este estado nororiental, que solicitó su suspensión, continúa. El viernes se entregó el decimocuarto cheque de un millón de dólares a un votante de Michigan (norte), según “America PAC”, la organización política de Elon Musk que hace campaña a favor de Donald Trump.
El miércoles por la noche, en vísperas de una audiencia en un tribunal de Filadelfia, los abogados de Elon Musk pidieron que el caso sea enviado a la justicia federal, argumentando que los hechos que se le imputan se relacionan con cuestiones electorales federales.
Después de considerar los argumentos de ambas partes, un juez federal de Filadelfia falló a favor de la fiscalía y devolvió el caso a los tribunales estatales.
Para participar en el sorteo hay que ser votante registrado en uno de los siete estados clave donde se disputarán las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, y firmar una petición conservadora a favor de la libertad de expresión y el derecho a portar armas.
El fiscal de Filadelfia, Larry Krasner, presentó una acción civil el 28 de octubre para detenerla con el fin de “proteger a la población de molestias públicas y prácticas comerciales desleales, incluidas las loterías ilegales”.
El Departamento de Justicia de EE.UU. ya ha recordado al equipo del multimillonario que es ilegal ofrecer una recompensa valiosa a un ciudadano por votar o registrarse para votar, y el presidente saliente, Joe Biden, ha calificado la iniciativa de “totalmente inapropiada”.
El ministerio no mencionó acciones legales, pero precisó las sanciones previstas en caso de infracción de la ley en este ámbito, concretamente multas o incluso prisión.
