Del 15 al 17 de octubre, estos jóvenes bomberos, procedentes de cuarenta departamentos franceses, intervienen en una situación real para validar su formación. En Aixe-sur-Vienne, cerca de Limoges, este ejercicio excepcional moviliza a 300 futuros bomberos durante dos días.
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Un fuerte terremoto azotó Limoges y su región, provocando un gran número de víctimas humanas y materiales y el desplazamiento de numerosos residentes cuyas casas se derrumbaron. Dada la magnitud de la catástrofe, el servicio departamental de bomberos y salvamento de Alto Vienne (SDIS 87) debe solicitar rápidamente el apoyo de los departamentos vecinos y de los recursos nacionales.
Tenga en cuenta que esto es sólo una simulación: este escenario catastrófico es el pretexto para un ejercicio a nivel nacional experimentado por casi 300 aspirantes a bomberos de una veintena de SDIS diferentes en el sur y el oeste de Francia, del 15 al 17 de octubre en Alto Vienne.
“Los preparativos comenzaron a principios de enero y han continuado hasta ahora. Estos ejercicios deberán durar cuarenta horas consecutivas, con un relevo cada cinco horas.“, explica el teniente coronel Thierry Soulier. Durante el ejercicio, los equipos viven en total autonomía.
Desde su puesto de mando, instalado frente al centro cultural Jacques-Prévert en Aixe-sur-Vienne (Alto Vienne), cientos de bomberos se distribuyeron en cuatro lugares de intervención en Alto Vienne: las canteras de Condat en Vienne, la ex -Clinique du Colombier y la antigua sede de EDF en Limoges y la sede de TDF en Nieul.
Este ejercicio permite a los aspirantes a bomberos validar su formación en condiciones del mundo real. “El principal objetivo del ejercicio es validar, a escala real en sitios reales y con un número importante de personal, a los aprendices en capacitación, tanto de la especialidad de rescate como de limpieza, USAR – apoyo de búsqueda para unidades de rescate – o cinotecnia”, añade Thierry Soulier.
El ejercicio a gran escala moviliza a casi 500 personas. Junto a los 300 bomberos están los organizadores, los evaluadores y quienes encarnan a las víctimas.
