Por primera vez desde junio de 2021, la inflación ha caído por debajo del objetivo del 2% fijado por el Banco Central Europeo (BCE).
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El aumento de los precios al consumo en los 20 países que comparten la moneda única cayó hasta el 1,8% interanual el mes pasado, su nivel más bajo en tres años y medio, gracias a la caída de los precios de la energía, revelaron el martes cifras de Eurostat. Por primera vez desde junio de 2021, la inflación ha caído por debajo del objetivo del 2% fijado por el Banco Central Europeo (BCE).
Este descenso podría animar a la institución monetaria a bajar una vez más sus tipos de interés a partir de octubre para reactivar el debilitado crecimiento económico en Europa. La desaceleración de la inflación es incluso mayor de lo previsto por los analistas de Factset, que esperaban una cifra del 1,9%, tras el 2,2% en agosto y el 2,6% en julio.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, expresó el lunes su confianza en este movimiento de retroceso. “Tendremos esto en cuenta en nuestra próxima reunión de política monetaria” el 17 de octubre, dijo durante una audiencia en el Parlamento Europeo, sugiriendo que un nuevo recorte de las tasas de interés, el tercero este año, era posible ya este mes.
-6% para los precios de la energía
La inflación subyacente, es decir, corregida por la volatilidad de los precios de la energía y los alimentos, especialmente vigilada por los mercados financieros y el BCE, también continuó su lento descenso en septiembre, hasta el 2,7% interanual, tras el 2,8% en agosto. según la oficina europea de estadística Eurostat.
Este buen comportamiento se explica principalmente por una caída del 6% en un año de los precios de la energía, incluidos los del combustible en el surtidor, que ya habían caído un 3% en agosto. El aumento de los precios de los servicios se desaceleró ligeramente hasta el 4% (-0,1 puntos respecto a agosto). El de los alimentos (incluidos el alcohol y el tabaco) repuntó muy ligeramente hasta el 2,4% (+0,1 puntos), mientras que el aumento de los precios de los bienes industriales se estabilizó en un nivel muy bajo (+0,4% en un año, como en agosto).
“Bajo crecimiento”
“La inflación está cayendo por debajo del objetivo del BCE que prevé una flexibilización monetaria más rápida”, comentó Bert Colijn, analista del banco ING. Según él, “las preocupaciones del BCE ahora se centran más en el débil crecimiento” en Europa.
En general, el aumento de los precios al consumo en la zona del euro se ha dividido casi por seis, desde el récord del 10,6% anual alcanzado en octubre de 2022, cuando los precios de la energía se disparaban en el contexto de la guerra en Ucrania. Esta tendencia marca una victoria para el BCE en su lucha contra el aumento vertiginoso de los precios. Le permitió comenzar a flexibilizar su política monetaria nuevamente en la primavera.
Reducción de tipos en octubre
Para frenar la inflación, la institución monetaria había aumentado los costes de endeudamiento a un ritmo sin precedentes, a partir de julio de 2022, aunque a costa de una fuerte desaceleración del crecimiento económico. El 6 de junio, el BCE bajó sus tipos clave por primera vez en cinco años, ofreciendo un soplo de aire fresco para reactivar el crédito inmobiliario y los préstamos comerciales. Hizo una nueva caída el 12 de septiembre.
“La caída de la inflación en septiembre debería ser suficiente para convencer al BCE de seguir reduciendo sus tipos en octubre”, estima Franziska Palmas, de Capital Economics.
(afp)
