Poco después de la una de la madrugada del sábado 28 de septiembre, los aficionados al fútbol del AC Ajaccio se reunieron en la terraza de un bar de Lorient. La pelea que se desató provocó el saqueo del establecimiento y se encontró sangre en varios lugares, sin que ningún herido alertara a los servicios de emergencia.
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Según el dueño del bar, entrevistado por nuestros compañeros de Télégramme, la escena fue extremadamente violenta. Sillas, mesas y botellas de alcohol arrojadas a la cabeza de los aficionados, insultos en todas direcciones… El episodio marcó al gerente del propietario del bar Le Monroe, en el corazón de Lorient, en la plaza Jules Ferry.
La escena se desarrolla durante la noche del viernes al sábado. Después del partido entre el FCL y el AC Ajaccio, una veintena de aficionados corsos se sentaron en el bar Le Monroe, mientras la policía permanecía cerca. Poco después de la 1 de la madrugada, la policía abandonó el lugar, pensando que los seguidores del Lorient, por su parte, ya no se encontraban en la zona.
Fue en ese momento cuando decenas de ultras, varios de ellos encapuchados, llegaron a la terraza del Monroe, dispuestos a dar batalla. La pelea continúa dentro del bar. Vitrinas, mesas, sillas y decks de DJ están rotos. Interrogado por nuestros compañeros de Le Télégramme, el director del Monroe estimó los daños “entre 5.000 y 1.000 euros”.
La policía regresó unos veinte minutos después, sin poder detener a los alborotadores. A pesar de los rastros de sangre encontrados en el lugar, no se reportaron heridos.
La policía de Lorient, que había traído refuerzos de Vannes para el arriesgado partido FCL contra el AC Ajaccio, indicó que estaba llevando a cabo una investigación sobre estos hechos.
