El nuevo inquilino de la plaza Beauvau fue el invitado del informativo TF1 el lunes 23 de septiembre. Consideró que “la inmigración masiva no es una oportunidad para Francia”.
El nuevo ministro del Interior, Bruno Retailleau, declaró el lunes 23 de septiembre por la noche que quería “tomar todos los medios” para “reducir la inmigración en Francia”.
«Tengo un objetivo, porque como millones de franceses, creo que la inmigración masiva no es una oportunidad para Francia y ni siquiera es una oportunidad para estos migrantes que a veces son enviados a morir en el mar», declaró el nuevo inquilino de la plaza Beauvau al informativo TF1.
“Quiero pues tomar todos los medios para reducir la inmigración en Francia”, declaró Bruno Retailleau, ex líder de los senadores del LR, figura de la derecha conservadora y partidario de una línea dura en materia de inmigración.
“Medidas legislativas que deben adoptarse”
Expresó su voluntad de “utilizar (su) poder regulador para llegar hasta el final de lo que podamos hacer” para reducir la inmigración ilegal, “puedo llegar bastante lejos”, aseguró.
Bruno Retailleau pretende “empezar por reunir en unos días a los diez prefectos de los diez departamentos donde hay más desorden migratorio para pedirles que expulsen más y regularicen menos” y para interrogarlos sobre posibles “agujeros en el sistema”. También hay que tomar “medidas legislativas”, añadió.
“No quiero (…) que Francia sea el país más atractivo de Europa por una serie de prestaciones sociales, por el acceso a la atención sanitaria”, afirmó, asegurando que quiere en particular reformar la ayuda médica estatal (AME).
Esta asistencia social garantiza atención médica gratuita a los extranjeros en situación irregular que se encuentren en territorio francés durante al menos tres meses.
El año pasado, la derecha senatorial de la que procede Bruno Retailleau ya había intentado eliminar la AME durante los debates sobre la ley de inmigración, para sustituirla por una “ayuda de urgencia” con un alcance drásticamente reducido.
Unos minutos más tarde, durante una visita a una comisaría de policía en La Courneuve, en Seine-Saint-Denis, el ministro afirmó que no “descartaría una nueva ley de inmigración”.
“El Consejo Constitucional ha censurado 35 artículos. Creo que algunos de ellos son esenciales y por eso hay que revisarlos”, afirmó.
El nuevo ministro del Interior reunirá a “una decena de prefectos de los departamentos más afectados (por la inmigración), para ver los obstáculos y los agujeros del negocio”.
“Les diré que hay que hacer lo máximo que podamos desde el punto de vista regulatorio: regularizar, naturalizar gota a gota, expulsar a los máximos que se puedan”, continuó.
Restablecer “el delito de residencia ilegal”
En TF1, Bruno Retailleau también propuso restablecer “el delito de residencia ilegal”, abolido bajo la presidencia de François Hollande. “Cuando uno entra en Francia de manera ilegal, es ilegal”, afirmó.
No descartó la posibilidad de implementar controles fronterizos aleatorios. “Veremos hasta dónde podemos llegar”, afirmó.
También expresó su deseo de comparar las legislaciones europeas y “formar una especie de alianza con los países que quieren más firmeza en materia de inmigración para revisar los textos europeos que hoy ya no sirven para nada”.
Finalmente, se declaró partidario de que el Gobierno dé marcha atrás en algunos acuerdos con Argelia, que facilitan la llegada de nacionales argelinos al territorio, o de “hacer acuerdos con los países del Magreb para que haya un control de la inmigración”.
