yoLa amenaza del gobierno húngaro de enviar en autobús a los solicitantes de asilo a Bruselas es “en una palabra, inaceptable”, confirmó el martes una portavoz de la Comisión Europea. El ejecutivo de la UE está dispuesto a aplicar la ley utilizando “todos sus poderes”.
El secretario de Estado húngaro, Bence Rétvàri, redobló la amenaza la semana pasada al posar delante de unos autobuses que llevaban el cartel “Röszke-Brüsszel”, llamado así por un paso fronterizo entre Hungría y Serbia en la ruta migratoria de los Balcanes, y les prometió “un billete de ida gratis a Bruselas”.
El vídeo de esta rueda de prensa provocó el lunes una ola de indignación en Bélgica. El país no permitirá el acceso a los transportes de migrantes “que se utilizan de esta manera”, reaccionó la secretaria de Estado de Asilo y Migración, Nicole de Moor. Por su parte, el alcalde de Bruselas, Philippe Close, pidió al primer ministro, Alexander De Croo, y a la ministra del Interior, Annelies Verlinden, que bloqueen estos autobuses en la frontera.
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La Comisión Europea también ha expresado su indignación: “Esto es inaceptable”, ha declarado la portavoz Anitta Hipper. “Esto violaría el derecho europeo y el principio de cooperación leal. Además, socavaría el funcionamiento mismo del espacio Schengen en su conjunto, donde la libertad de circulación de personas está garantizada por principio”.
La Comisión Europea afirma que está en contacto con Hungría para asegurarse de que la amenaza no se lleve a cabo. También se ha puesto en contacto con los países que se encuentran en la ruta de Hungría hacia Bruselas. “Estamos dispuestos a garantizar, con todos los poderes a nuestra disposición, que se respete la legislación”, añadió el portavoz, sin dar más detalles.
Schengen
El lunes, Alemania aumentó la tensión al anunciar que pronto ampliará sus controles temporales en las fronteras del país, en el marco de su lucha contra la inmigración ilegal. Los controles con Francia, Luxemburgo, Países Bajos, Bélgica y Dinamarca se establecerán durante seis meses a partir del 16 de septiembre. Se sumarán a los controles ya establecidos en las fronteras con Polonia, República Checa, Austria y Suiza. La Comisión Europea confirmó que Berlín le había informado de esta intención y que está examinando actualmente las modalidades comunicadas.
“El Código de fronteras Schengen permite este tipo de controles temporales, pero deben ser necesarios y proporcionados. Este tipo de medidas deben seguir siendo excepcionales”, recordó Anitta Hipper, que declinó hacer más comentarios “porque apenas hemos recibido la notificación”.
La Comisión recuerda que existen alternativas a los controles fronterizos unilaterales, como las patrullas policiales conjuntas entre los Estados fronterizos. El Código de fronteras Schengen, base de la legislación de la UE en esta materia, fue reformado a principios de este año. Además, el nuevo Pacto sobre Migración y Asilo permitirá a Europa luchar mejor contra la migración ilegal, añade la Comisión.
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Por su parte, Nicole de Moor (CD&V) señala que Alemania ha tomado esta medida en cumplimiento de las normas europeas, tras un “horrible atentado” del que ha sido víctima recientemente (el atentado de Solingen reivindicado por el grupo Estado Islámico, ndr). Ya lo ha hecho en el pasado, al igual que Bélgica tras los atentados de Bruselas, en particular. En su opinión, este tipo de reacciones se evitarán reforzando los controles en las fronteras exteriores.
Su colega del Interior, Annelies Verlinden (CD&V), no ha dicho nada más: “Seguimos de cerca la situación, pero por el momento no es necesario volver a introducir controles fronterizos estrictos”, comentó a VRT.
