El debate ha sido intenso desde que se implementó gradualmente la reforma. Al prolongar la mayor parte del Masters 1000 a dos semanas (solo los de Montecarlo y el Rolex Paris Masters no se ven afectados), la ATP ha tomado una decisión controvertida para resaltar mejor sus eventos “premium”. El objetivo era acercarse al formato “Grand Slam” abriendo las mesas a 96 jugadores, lo que también generaba más ingresos. Pero si algunos jugadores están de acuerdo, muchos han criticado este desarrollo y el jueves se agregó a la lista un nombre notable, Stefanos Tsitsipas.
El griego, obviamente oyente del podcast “Served” de Andy Roddick, tomó un extracto del mismo en X, que acompañó de una dura observación sobre la reciente reforma de la ATP. “El Masters 1000 de dos semanas se ha vuelto aburrido. La calidad realmente ha bajado. Los jugadores no están teniendo el tiempo de recuperación y entrenamiento que necesitan, con partidos constantes y sin espacio para el trabajo intenso fuera de la cancha“, remarcó.
Un partido más y un mayor cansancio mental
Tsitsipas señala así una paradoja. Ciertamente, estos Masters 1000 ampliados permiten a los jugadores tener un día de descanso entre cada uno de sus partidos, como en un Grand Slam, aunque la competición sea al mejor de tres sets. Sobre el papel, físicamente, la prueba es menos pesada que en el pasado. Pero al ampliar los sorteos, todos tienen que jugar un partido adicional -6 para los primeros 32 cabezas de serie, 7 para los demás- y el cansancio mental es mayor porque el torneo dura más, lo que genera un esfuerzo adicional para mantenerse en su burbuja.
Y este tiempo adicional en competición se aprovecha de posibles bloques de entrenamiento que permitan a los jugadores llegar preparados en términos de condición física a estos grandes torneos. Más cansados y más propensos a lesionarse – la observación fue incesante desde este punto de vista, especialmente durante la primavera en tierra batida en relación con los grandes nombres –, el nivel del tenis ofrecido se ve afectado.
A veces parece que el ATP está arreglando lo que no estaba roto.
“Es irónico que la ATP apostara por este formato sin saber si podría mejorar el calendario y la calidad al mismo tiempo. París tiene razón, todo está hecho en una semana. Es emocionante y fácil de seguir. Justo como debería serañadió Tsitsipas. Si el objetivo era agilizar el calendario, alargar cada Masters 1000 a dos semanas es un paso atrás. A veces parece que están arreglando lo que no estaba roto“.
Esto tiene el mérito de ser claro. Si ya no está en el Top 10 y no se clasifica para el Masters por primera vez desde 2018, Stefanos Tsitsipas sigue siendo una voz, una personalidad del circuito, y su carga contra la ATP seguramente no pasará desapercibida. Antes que él, otras como Caroline García, del lado femenino, se habían pronunciado sobre el tema. Sería interesante ver si el pensamiento del griego se comparte ampliamente en el circuito, especialmente entre los mejores jugadores del mundo.