Al menos 901 personas fueron ejecutadas en Irán el año pasado, de las cuales unas 40 en una sola semana de diciembre, deploró el martes el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk.
“Es muy preocupante comprobar que el número de personas condenadas a muerte en Irán aumenta de año en año”, comentó Türk en un comunicado de prensa, considerando que “ya es hora de que Irán ponga fin a esta ola”. de ejecuciones”.
Al menos 853 personas fueron ejecutadas en 2023 en Irán, según el Alto Comisionado.
Durante una conferencia de prensa, una portavoz del Alto Comisionado, Liz Throssell, explicó que las cifras provienen “de diferentes organizaciones de derechos humanos (…) que consideramos confiables, HRANA, Hengaw e Iran Human Rights.
Según el comunicado, la mayoría de las ejecuciones en 2024 fueron por delitos de drogas, pero también fueron ejecutados disidentes y personas vinculadas a las protestas de 2022-2023.
La Oficina también informa de un aumento en el número de mujeres ejecutadas.
Según Iran Human Rights, las autoridades iraníes han ejecutado al menos a 31 mujeres en 2024, un récord desde que esta organización no gubernamental comenzó en 2008 a registrar la aplicación de la pena capital en la república islámica.
“Muchas mujeres ejecutadas por asesinato fueron víctimas de violencia doméstica o abuso sexual actuando por desesperación”, según el IHR.
Según varias organizaciones de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional, Irán es el país del mundo que ejecuta al mayor número de personas, aparte de China, de la que no se pueden obtener cifras.
La ley islámica de represalias, aplicada en Irán y conocida como qisas, establece que un asesinato debe “pagarse” con la pérdida de otra vida a menos que la familia de la víctima perdone o acepte un pago de compensación.
“Nos oponemos a la pena de muerte en todas las circunstancias”, subrayó Türk el martes. “Es incompatible con el derecho fundamental a la vida y presenta el riesgo inaceptable de ejecutar a personas inocentes. Y, para ser claros, nunca puede imponerse por conductas protegidas por el derecho internacional de los derechos humanos”, afirmó.
Instó a las autoridades iraníes a suspender las ejecuciones y establecer “una moratoria” sobre la pena de muerte con miras a abolirla.
Unos 170 Estados la han abolido o han establecido una moratoria, según la ONU.
Activistas de derechos humanos acusan a las autoridades iraníes de utilizar la pena de muerte para infundir miedo en la sociedad, especialmente desde 2022.
Throssell dijo que Irán ejecutó al menos a 972 personas en 2015, “la cifra más alta en décadas”.
En 2017, tras una reforma de la lucha contra las drogas, “observamos una disminución notable”, pero “desde 2022 el número de ejecuciones ha aumentado significativamente”, afirmó.
