Publicado el 11/12/2024 18:35
Actualizado el 13/11/2024 06:31
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Los franceses son el tercer mayor consumidor de especias de Europa. Y entre estos, el chile está cada vez más presente en nuestras mesas. Encuentro con Lee Cheng, fundador de los restaurantes Trois fois plus de chili que, desde hace casi veinte años, ofrecen una explosiva cocina de Sichuan en el corazón de París.
Los franceses son los tercer mayor consumidor de especias en Europa, detrás de los alemanes y los belgas. Entre estos aromáticos, la pimienta es cada vez más popular. En los supermercados, los fideos instantáneos coreanos Buldak 3X Spicy se acompañan de patatas fritas “Hot & Spicy” y otras botellas Martin de “la fábrica francesa de salsa picante”.
Incluso el paté tradicional de Hénaff, tan querido por los bretones, existe incluso en una versión picante, cambiando su histórico azul por un vestido rojo brillante para la ocasión. Finalmente, el éxito del espectáculo. Caliente Unospresentado por Kyan Khojandi, quien prueba la resistencia al chile de las celebridades, es tal que McDonald’s acaba de lanzar tres de estas salsas.
Lee Cheng es el fundador de los restaurantes parisinos Deux fois y Trois fois plus de chili, que ofrecen la cocina más explosiva de la provincia china de Sichuan. Tanto es así que los clientes deben elegir entre 0 y 5 por la fuerza de sus platos.
“No queremos hacerte llorar” ríe el hombre que en 2008 abrió su primer restaurante en el distrito 11 de París sin saber realmente si los clientes franceses aceptarían el juego. “Al principio solo venían asiáticos, pero a partir de 2011 casi solo venía gente del barrio”. Como Frédéric, un empresario de 63 años que viene muy a menudo y para quien la guindilla es tan importante como la sal o la pimienta: “Yo lo uso para ensaladas, guacamole, pescado o pasta. De lo contrario, todo me parece demasiado insulso.”
Myssan, de 29 años, de origen vietnamita, entrena desde pequeña “comer pimientos como si fueran patatas fritas” desde que vio a su tío hacerlo. También es cliente habitual del restaurante y le gusta venir y poner a prueba sus límites. “Las últimas veces tomé el poder 3 o 4 y sufrí mucho. Ahora seguiré siendo humilde y tomaré 2 como fuerza”. Poner a prueba tu resistencia al ají se ha convertido en una auténtica tendencia en las redes sociales. “Estos retos no los podemos hacer con otros sabores como el salado”, continúa Lee Cheng. “Después del dolor, tenemos una sensación de placer. Como resultado, la gente tiene la impresión de vivir una aventura con la pimienta. Pero cuidado, con moderación…”
“En Francia faltan pimientos”, analiza Lee Cheng para quien esta nueva moda francesa por el chili quizás llene un vacío en la gastronomía francesa. Por último, sólo una parte de nuestra cocina, ya que en las Antillas o en la Isla de la Reunión, la guindilla forma parte integrante de la lista de ingredientes imprescindibles desde hace mucho tiempo. La escala Scoville mide la potencia de un pimiento. Por ejemplo, la mostaza clásica sube hasta las 300 unidades en esta escala. El pimiento de Espelette, por su parte, trepa con dificultad hasta los 2.000. Estamos lejos de los 200.000 que puede alcanzar el pimiento habanero, el que se utiliza en los departamentos de ultramar.
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