Ampliamente utilizada por primera vez en urología, la cirugía asistida por robot mínimamente invasiva se utiliza cada vez más en ginecología. Con soluciones cada vez más innovadoras en la actualidad, ofrece numerosos beneficios tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios. Explicaciones de dos cirujanos y un directivo de la asociación de pacientes IMAGYN.
Cirugía mínimamente invasiva asistida por robot: ¿de qué estamos hablando?
“La cirugía mínimamente invasiva con asistencia robótica consiste en realizar intervenciones sin necesidad de realizar grandes incisiones“, explica la Dra. Enrica Bentivegna, cirujana de oncología ginecológica del Hospital Europeo Georges-Pompidou (AP-HP) “.Realizamos la operación a través de pequeñas incisiones de menos de un centímetro, lo que ayuda a evitar secuelas estéticas, reducir el dolor postoperatorio y mejorar la recuperación.“.
El Dr. Bentivegna continúa: “A través de las incisiones se introducen instrumentos muy finos, y aquí es donde interviene el robot. Actúa como intermediario entre la mano del cirujano y el paciente. Además, la visión del cirujano es magnificada y tridimensional, sumergiéndolo literalmente dentro del cuerpo del paciente. Esto hace que los procedimientos quirúrgicos sean más precisos y respetuosos con las estructuras internas, reduciendo el riesgo de complicaciones.“.
El nuevo da Vinci SP, una gran innovación
En este ámbito, una importante innovación acaba de ver la luz en Francia. “Así es el robot da Vinci SP de puerto único“, especifica la profesora Céline Chauleur, jefa del departamento de cirugía ginecológica y oncológica del Hospital Universitario de Saint-Etienne (Loira). “Puerto único significa que el robot solo debe realizar una incisión en comparación con las cuatro anteriores. Por tanto, esto reduce aún más el número de cicatrices. Creo que esto será particularmente útil para las cirugías ginecológicas. También realizamos la primera intervención el 27 de septiembre. Esta fue una histerectomía simple, pero nuestro objetivo es desarrollar esta tecnología para otras indicaciones.“.
¿Una técnica quirúrgica óptima para la mujer?
Inicialmente, esta tecnología se utilizó principalmente en urología, pero luego se expandió a otras especialidades como la ginecología. “Inicialmente estaba reservado a la cirugía oncológica ginecológica.“, dice el Dr. Bentivegna. “Particularmente para cánceres como el cáncer de endometrio. El robot permite extirpar los tumores con mucha precisión, preservando al mismo tiempo los órganos sanos que los rodean. Esto es crucial para garantizar una buena recuperación después de la operación y poder recibir rápidamente tratamientos adicionales si es necesario. Posteriormente, el robot también ha demostrado ser muy útil para tratar afecciones benignas, como la endometriosis, los miomas o el prolapso genital, donde es importante respetar los tejidos circundantes a la hora de eliminar las lesiones.“
Beneficios para pacientes y profesionales sanitarios
Hoy en día, gracias a estas nuevas herramientas eficientes, es posible reducir drásticamente las incisiones. Tanto es así que, según la profesora Céline Chauleur, “las cicatrices pueden volverse casi invisibles o al menos cada vez más discretas. Las técnicas mínimamente invasivas también ayudan a acelerar la convalecencia del paciente y reducir las complicaciones. La principal ventaja es que al reducir las complicaciones también podemos aumentar la atención ambulatoria, lo que significa que los pacientes pueden regresar a casa más rápidamente después de un procedimiento.“.
Para Coralie Marjollet, presidenta de la Asociación IMAGYN (asociación de pacientes y familiares afectados por cánceres ginecológicos), “Los beneficios para las mujeres son inmensos, tanto a nivel estético como funcional. Es imperativo que ahora se dirijan a centros expertos para que se beneficien de los últimos avances tecnológicos.“
En cuanto a los cirujanos, se benefician de un verdadero confort operativo, con una visión óptima del campo operatorio. “Este sistema nos permite realizar gestos mucho más precisos y por tanto operaciones más complejas mediante un método mínimamente invasivo.“, testifica el Dr. Bentivegna.
Lamentablemente, estas nuevas tecnologías aún no son fácilmente accesibles en ginecología en todo el país. Para fomentar su difusión,El primer paso es hacer que esta tecnología esté disponible en más hospitales, porque por el momento está limitada a determinadas estructuras.“, dice la Dra. Enrica Bentivegna.Y hoy la asistencia robótica en salud parece imprescindible, además cada vez hay más actores en el mercado por lo que esto debería evolucionar favorablemente. Entonces necesitamos aumentar la conciencia pública. Cuanto más conscientes sean los pacientes de estos avances, más pedirán beneficiarse de estas técnicas.“