Las autoridades sanitarias de Ruanda desplegaron este domingo una vacuna de prueba contra la fiebre hemorrágica de Marburgo, mientras el país afronta una epidemia que ya ha causado 12 muertes.
Ruanda recibió 700 dosis de una vacuna en evaluación, suministradas por el Instituto de Vacunas Sabin. Sabin Nsanzimana, Ministro de Salud, aclaró: “La vacunación comienza por dirigirse a las personas con mayor riesgo y más expuestas. Entre ellos se incluye el personal sanitario que trabaja en centros de tratamiento, hospitales, unidades de cuidados intensivos y salas de urgencia, pero también familiares de casos confirmados. »
Al igual que el virus del Ébola, se cree que el virus de Marburg se origina en los murciélagos frugívoros y se transmite entre individuos a través del contacto cercano con los fluidos corporales de personas infectadas o a través de superficies contaminadas, como las sábanas. Sin un tratamiento específico, el virus puede ser mortal.
La preocupación es palpable entre la población. Emmanuel Niyonkuru, mototaxista, testifica: “Me preocupé tan pronto como me enteré. Se ha anunciado que el 90% de los pacientes con enfermedad de Marburg mueren, lo que significa que morirán 9 de cada 10 casos confirmados. Es realmente aterrador. En nuestro trabajo no podemos establecer distancia entre nosotros y nuestros clientes. Hemos logrado evitar el COVID-19 tomando ciertas medidas, como quitar las gafas de los cascos para permitir que nuestros clientes respiren. Realmente me temo que seremos los primeros a los que se nos impedirá trabajar. »
Aunque Ruanda descartó implementar un confinamiento para combatir la propagación del virus, las autoridades han llamado a la población a evitar cualquier contacto físico. Según el Centro Africano para el Control y la Prevención de Enfermedades, la mayoría de las personas que han contraído la enfermedad son trabajadores sanitarios.
