Un estudio reciente acaba de confirmar el vínculo entre el uso de cigarrillos electrónicos y un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca.
Por Linda Lam, publicado el 26 de abril de 2024
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¿Y si vapear fuera malo para el corazón? Esto es lo que parece demostrar un estudio prospectivo, considerado uno de los más grandes y completos hasta la fecha, que examinó el vínculo entre el uso de cigarrillos electrónicos y las enfermedades cardíacas.
Vapear y la salud del corazón
Si bien el vapeo se presenta a menudo como una alternativa menos dañina que fumar, cada vez más investigaciones demuestran que su uso es peligroso para la salud.
Un estudio, presentado en la sesión científica anual del Colegio Americano de Cardiología en abril de 2024, demuestra su impacto en el corazón.
Realizado entre 175.667 participantes, reveló que los vapeadores tenían un 19% más de riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca que aquellos que nunca habían usado este dispositivo (ya sea cigarrillo electrónico, vaporizador, mods personales, etc.).
Efectos de los cigarrillos electrónicos sobre diferentes tipos de insuficiencia cardíaca
Al analizar los datos por tipo de insuficiencia cardíaca, los resultados muestran un mayor riesgo más significativo con los cigarrillos electrónicos en casos de insuficiencia cardíaca con fracción de eyección preservada (HFpEF), donde el músculo cardíaco se endurece y no puede llenarse de sangre.
Por el contrario, no se observó una correlación significativa en la insuficiencia cardíaca con la fracción de eyección reducida (HFrEF), donde el músculo cardíaco se debilita y no se contrae.
Recomendaciones para jóvenes vapeadores
Tras estos resultados, los científicos enfatizan la importancia de realizar más investigaciones para comprender mejor el impacto del vapeo en la salud del corazón.
Les preocupa especialmente la creciente popularidad de los cigarrillos electrónicos entre los jóvenes, que podría tener graves consecuencias para la salud pública a largo plazo.
El pasado mes de septiembre, la EFP (Federación Europea de Periodoncia) ya había advertido de los peligros de los cigarrillos electrónicos para la salud bucal.
