“Para gestionar mejor el dolor, lo visualizaremos, lo transformaremos y lo embelleceremos”

“Para gestionar mejor el dolor, lo visualizaremos, lo transformaremos y lo embelleceremos”
“Para gestionar mejor el dolor, lo visualizaremos, lo transformaremos y lo embelleceremos”
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– Por qué Doctor: En los últimos años, la hipnosis se ha practicado cada vez más, sobre todo en algunos hospitales, para reducir la ansiedad y el dolor en pacientes hospitalizados. Pero, ¿en qué consiste?

Delphine Beucher: A diferencia de la hipnosis de escenario o la hipnosis callejera, que pueden hacer eco de todo un mundo imaginario, en particular de manipulación y control, la hipnosis, que aquí tiene como objetivo principal el cuidado, es una terapia que permite estar en armonía con el propio cuerpo y mente. A través de las palabras, este método inducirá en el paciente un estado modificado de conciencia caracterizado por una indiferencia hacia el exterior y una capacidad muy aumentada para recibir sugestiones. Al acercarse a su inconsciente, que solo inyecta lo positivo y no tiene en cuenta lo negativo, aceptará sus traumas, es decir, todo el bagaje que lleva desde su infancia, lo que le permite volver a la fuente de su problema. Una vez identificado, el paciente pondrá en marcha soluciones para liberarse y aligerarse. Porque sí, no soy un mago. No soy yo quien hará el trabajo, lo acompaño y lo guío solo para ayudarlo a encontrar soluciones. Por lo tanto, si la persona cree que tiene un problema que está relacionado con la medicina, debe buscar el consejo de un médico, porque la sesión de hipnosis no es una consulta médica. De igual modo, no sustituye en ningún caso al tratamiento médico.

Hipnoterapia: “Todo el mundo puede utilizarla, excepto personas con trastornos de personalidad”

– ¿En qué casos se puede ofrecer la hipnosis?

La terapia con hipnosis puede ser recomendada en casos de dolor crónico, problemas de autoestima y confianza, ansiedad, depresión, adicciones como el tabaquismo, problemas de sexualidad, trastornos alimentarios. También puede utilizarse para perder peso. En este caso, si una persona nunca deja de comer, intentaremos entender si está llenando un vacío o si está vinculado a un elemento transgeneracional, por ejemplo, comer le recuerda a su madre fallecida.

– ¿Es accesible para todos?

Cualquier persona puede utilizar la hipnosis, excepto personas con trastornos de personalidad, como esquizofrenia, epilepsia, psicosis, problemas cardíacos graves y paranoia. También está contraindicada para adultos con problemas cardíacos, porque durante la sesión se ralentiza la respiración y el aliento para alcanzar un estado de bienestar.

En niños mayores de cuatro años y medio, que tienen sesión por rabietas, enuresis o fobia escolar, este método funciona bien, porque tienen mucha imaginación.

Durante la sesión de hipnosis, “apelamos a la imaginación de la persona”

– En pacientes con dolor crónico, ¿cómo ayuda este método a aliviarlo?

En general, el cerebro recuerda principalmente lo que le duele. Para gestionar mejor el dolor, le diremos al paciente que lo visualice, no utilizando palabras negativas, como “mal” o “dolor”, sino con términos como “sensaciones desagradables”. Luego, le pediremos que lo transforme, más precisamente, lo animamos a encontrar la manera de embellecerlo.

– ¿Cómo se desarrolla una sesión de hipnosis?

Durante la primera cita, siempre empezamos con una anamnesis. Hablaremos con el paciente y le haremos preguntas para entender mejor sus necesidades, sus objetivos y su historia. Después, continuamos con el trance para salir tranquilamente, para estar en un estado de bienestar y permitir que la persona se centre en sí misma. Para este paso, su respiración, las palabras, el tono y el ritmo de la voz del experto son elementos clave. Una vez que el paciente olvida lo que ocurre en su entorno, pasamos a la visualización durante la cual le pedimos, por ejemplo, que sienta el dolor o que tome conciencia de su ubicación. Después, le animamos a modificarlo y transformarlo para que le resulte más cómodo, por ejemplo con una mano mágica, con calor o con frío. Por ejemplo, en los niños, algunos perciben su dolor como una bola de lana con varios nudos, les pediremos que busquen una solución para eliminarlos. En este caso, apelamos a la imaginación de la persona.

“Se necesita una dosis de fuerza de voluntad” para que la hipnoterapia sea efectiva

– ¿Cuál es la duración y frecuencia de las sesiones?

Una sesión dura entre 45 minutos y una hora. En cuanto a la frecuencia, la persona puede volver a acudir a los 15 días o tres semanas de su primera sesión, pero depende de su problema y también de su inversión, pues debe utilizar las herramientas que le ofrezco en casa para cambiar sus hábitos. El paciente debe ser actor de su bienestar.

– ¿Qué se debe hacer para que las sesiones sean efectivas?

Para que funcione, se necesita una cierta fuerza de voluntad, sobre todo para ciertas cuestiones como dejar de fumar. El paciente debe querer entrar en hipnosis y solucionar su problema. No debe venir porque un tercero le haya pedido o sugerido que recurra a la hipnosis. También debe confiar en su hipnoterapeuta y tener una buena capacidad para seguir instrucciones. Si se dan todos estos factores, la persona cambiará cuando comience la terapia de hipnosis. Generalmente, son los que le rodean los primeros en notarlo.

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