Ante el rápido crecimiento demográfico y el creciente desempleo juvenil, los países africanos están intensificando sus esfuerzos para promover el espíritu empresarial juvenil como una solución sostenible a este desafío. Según el Reloj del Empleo Juvenil de África, alrededor de 121 millones de jóvenes de entre 15 y 35 años estarán desempleados o no recibirán educación ni formación en 2025, un aumento de 2,8 millones en comparación con 2024.
Una de las principales iniciativas en esta dirección está liderada por el Banco Africano de Desarrollo (BAfD), que desembolsó el año pasado una cifra récord de 577 millones de dólares en préstamos y subvenciones para apoyar las empresas dirigidas por jóvenes y la creación de empleo. Al menos 13 países, entre ellos Tanzania, Somalia y Sudán del Sur, se han beneficiado de esta financiación. Por ejemplo, en septiembre, Tanzania recibió un préstamo de 130 millones de dólares para apoyar a empresas agrícolas dirigidas por jóvenes, mientras que Sudán del Sur obtuvo una subvención de 5 millones de dólares para empresas dirigidas por jóvenes.
El Dr. Akinwumi Adesina, Presidente del BAfD, destacó la importancia de invertir en el emprendimiento juvenil y dijo que “el mayor riesgo es no invertir en los jóvenes”. Reiteró el compromiso del banco de aumentar la financiación para iniciativas lideradas por jóvenes.
Al mismo tiempo, países como Kenia han lanzado fondos específicos para financiar pequeñas empresas y jóvenes emprendedores que enfrentan dificultades para acceder a préstamos bancarios tradicionales. Kenia ha creado un fondo de 385 millones de dólares para apoyar estas iniciativas. Por su parte, Tanzania ha asignado 110 millones de dólares para apoyar a 6.000 jóvenes empresarios del sector agroindustrial como parte de su programa “Construyendo un mañana mejor: iniciativas juveniles para los agronegocios”.
Estos esfuerzos reflejan un reconocimiento cada vez mayor del papel crucial que desempeña el espíritu empresarial en la creación de empleos y la estimulación del crecimiento económico en África. Sin embargo, a pesar de estas iniciativas, la tasa de desempleo juvenil sigue aumentando, lo que pone de relieve la necesidad de implementar políticas efectivas y aumentar el apoyo a los jóvenes emprendedores.
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