el ultimo censo población general y vivienda 2024 destaca avances significativos en el ámbito de la educación en Marruecos, en particular un aumento de tasa de matriculación escolar y uno disminución del analfabetismo. Sin embargo, persisten desafíos importantes, relacionados con las disparidades regionales, las brechas de género y la integración de las tecnologías digitales en el sistema educativo. Estos hallazgos exigen políticas inclusivas para garantizar el acceso equitativo a la educación para todos.
El análisis de los datos de los documentos compartidos destaca varios aspectos clave relacionados con el sector de la educación, la formación y la educación superior en Marruecos:
La escolarización aumenta pero sigue siendo desigual
Tasa de matrícula: Se han registrado avances notables en la escolarización de niños menores de 15 años, con un aumento significativo para las niñas en las zonas rurales, alcanzando el 95,1% para los niños de 6 a 11 años en 2024. Sin embargo, persisten brechas entre las zonas urbanas y rurales, y entre las zonas rurales y urbanas. los sexos para determinados grupos de edad.
Duración promedio de la escolarización: el promedio nacional aumentó de 4,4 años en 2014 a 6,3 años en 2024. Las regiones urbanas y los hombres siguen estando en ventaja, con disparidades notables en regiones como Béni Mellal-Khénifra y Drâa-Tafilalet.
Mejora del nivel educativo
Nivel secundario y superior: Alrededor del 39,1% de los marroquíes de 25 años o más tienen al menos un nivel de educación secundaria universitaria en 2024, frente al 30,2% en 2014. Los principales centros urbanos y las regiones del sur muestran resultados superiores a la media nacional.
Analfabetismo: La tasa de analfabetismo cayó al 24,8% en 2024, en comparación con el 32,2% en 2014. Esta disminución es más marcada entre las mujeres y en las zonas rurales, incluso si persisten las disparidades regionales.
Desafíos para la educación superior
La proporción de personas con educación superior sigue siendo limitada, aunque se han logrado avances. Las regiones urbanas, como Casablanca-Settat y Rabat-Salé-Kénitra, concentran una gran proporción de graduados de educación superior.
Tecnologías y educación
Equipamiento digital: el 84,4% de los marroquíes tiene un teléfono móvil personal, pero sólo el 8,8% dispone de un ordenador o una tableta. El uso de Internet está muy extendido entre los jóvenes (76,9% entre las personas de 15 a 34 años), pero sigue siendo menos común en las zonas rurales (40,4%).
Educación digital: Estas cifras resaltan el potencial y la necesidad de integrar aún más lo digital en los métodos de enseñanza para reducir las brechas.
Disparidades regionales
Las regiones del sur, como Laâyoune-Sakia El Hamra, destacan por tener tasas más altas de alfabetización y educación. Por otra parte, regiones como Béni Mellal-Khénifra y Drâa-Tafilalet siguen experimentando retrasos importantes.
Lenguas leídas y escritas: dominio variado según región y entorno
El censo muestra que el 99,2% de la población alfabetizada de 10 años o más sabe leer y escribir en árabe, mientras que el 1,5% domina el amazigh con la escritura tifinagh. En cuanto a lenguas extranjeras, el dominio se distribuye de la siguiente manera: 57,7% para francés, 20,5% para inglés, 1,2% para español y 1% para otras lenguas.
El conocimiento de francés e inglés es significativamente mayor en las zonas urbanas, con un 64,3% y un 25,2% de la población alfabetizada respectivamente, en comparación con un 42,1% y un 9,6% en las zonas rurales.
Marruecos ha logrado importantes avances en el acceso a la educación y en la mejora del nivel de estudios. Sin embargo, las disparidades regionales, las brechas de género y los desafíos relacionados con la integración de las tecnologías digitales requieren especial atención. Una política educativa inclusiva, respaldada por inversiones específicas y una mejor distribución de los recursos, es esencial para abordar estos desafíos y alinear el sistema educativo marroquí con las necesidades socioeconómicas del país.