El acoso sexual en el lugar de trabajo sigue estando muy extendido en Suiza, a pesar de las medidas de prevención adoptadas. Casi un tercio de los empleados ya se ha enfrentado a este problema.
Sin embargo, la diferencia entre sexos es marcada: el 44% de las mujeres afirma haber sufrido ya acoso sexual durante su vida profesional, frente al 17% de los hombres, constató el martes. un estudio de la Oficina Federal para la Igualdad entre Mujeres y Hombres (BFEG) y de la Secretaría de Estado de Asuntos Económicos (SECO).
Cuando a los encuestados se les presentan comportamientos sexistas o sexuales concretos, la tasa de personas que dicen haber sufrido acoso aumenta incluso al 52%, nuevamente con una brecha significativa entre mujeres (59%) y hombres (46%).
Durante los doce meses anteriores a la encuesta, los jóvenes fueron más a menudo víctimas de incidentes y se sintieron acosados sexualmente que las personas mayores.
La edad juega un papel particularmente importante en las mujeres. Un tercio de ellos, de entre 16 y 25 años, afirma haber sufrido acoso sexual en su lugar de trabajo en los doce meses anteriores a la encuesta.
Las personas más afectadas son aquellas que trabajan en estrecho contacto con los clientes, por ejemplo en el sector bancario, hotelero y de restauración o sanitario. Los autores del acoso suelen ser colegas varones del mismo nivel jerárquico que la víctima. Las mujeres también suelen denunciar acoso por parte de sus superiores.
Cifras “alarmantes”
En un comunicado, Unia considera que estas cifras “alarmantes” corresponden a los testimonios recibidos diariamente. Los empresarios deben asumir por fin sus responsabilidades conforme a la ley y Suiza debe ratificar urgentemente los convenios internacionales, exige el sindicato.
Unia pide en particular un fortalecimiento de la ley, normas, sanciones y procedimientos claros contra el acoso dentro de las empresas, así como puntos de contacto neutrales. Además, es necesario informar periódicamente al personal y realizar controles. Todos estos diferentes puntos deben estar anclados en convenios colectivos de trabajo.
Los empleadores están obligados por ley a tomar medidas para prevenir el acoso en el lugar de trabajo, señalan la BFEG y la SECO. A pesar de esta obligación, una empresa de cada cinco no ha implementado aún ninguna medida de prevención o intervención. El estudio revela que las empresas tienen un conocimiento muy pobre del marco legal, al igual que su personal.
Frente a esta observación, el estudio invita a las empresas a aumentar la sensibilización y la información entre sus ejecutivos. También deberían crear estructuras y procesos internos claramente establecidos para facilitar la notificación de incidentes y permitir que los afectados obtengan apoyo.
BFEG y SECO revisarán sus materiales de información y capacitación. Los nuevos documentos se publicarán a finales del próximo año.
ats/ebz