Estudiantes ucranianos aprenden francés el martes 24 de mayo de 2022 cerca de Sion. Imagen: TRAPEZOIDAL
Una moción quiere limitar el estatus de protección S de los ucranianos en Suiza a determinadas zonas. El presidente del Centro, Gerhard Pfister, está en el centro del debate.
02.12.2024, 16:5702.12.2024, 16:58
Benjamín Rosch / ch media
Cuando el Consejo de Estados debatió en junio pasado una moción de la diputada de la UDC, Esther Friedli, no previó sus repercusiones. El acta sólo recoge tres intervenciones: la propia autora de la moción, el consejero de Estado socialista Pierre-Yves Maillard y el consejero federal responsable, Beat Jans.
Seis meses después la situación ha cambiado: Quienes se oponen a la moción temen que Suiza se convierta, junto con Noruega, en el primer país de Europa en dividir legalmente Ucrania en dos territorios separados: De hecho, los escandinavos están planeando dividir Ucrania en zonas a las que podrían regresar los refugiados. Una cosa es segura: la solidaridad de Suiza con este país devastado por la guerra está siendo puesta a prueba.
“Nadie está a salvo en Ucrania”
En concreto, se trata del estatus de protección S, de la que se benefician 67.000 ucranianos en Suiza desde el inicio de la guerra. Este estatus permite a los refugiados viajar al extranjero o trabajar en Suiza. En su intervención, Esther Friedli pide que este estatuto de protección se conceda únicamente a las personas que viven en regiones ocupadas por Rusia o que actualmente se encuentran en medio de combates. Y para explicar, para justificar su planteamiento:
“Cada vez son más los casos de refugiados que solicitan el estatus de protección S, pero cuya vida e integridad física no se ven amenazadas”
Al mismo tiempo, los municipios y las escuelas suizas se ven afectados por los ataques.
El Consejo Federal se opone a este enfoque, particularmente por razones de política exterior. Una división así no estaría en conformidad con las normas vigentes en otros países europeos, indica en respuesta a la intervención.
“Reducir la migración secundaria y evitar cargas adicionales para los sistemas de acogida son objetivos comunes para Suiza y la UE. Una actitud aislada por parte de Suiza iría en contra de este objetivo declarado en varias ocasiones por el Consejo Federal”.
Dentro del Departamento de Justicia, además, se cree que nadie está seguro en Ucrania. Dado que Rusia también utiliza misiles de alcance medio, prácticamente todos los lugares del país podrían convertirse en objetivos potenciales para Putin, según ha oído también el Departamento Federal de Justicia y Policía.
Miedo a un aceptación de la moción
Beat Jans parece poder contar a este respecto con el apoyo burgués en el Consejo Federal. Documentos de administración interna, enviados el viernes a hacer clicmuestran que tanto el Departamento de Asuntos Exteriores de Ignazio Cassis como el Departamento de Economía de Guy Parmelin no están de acuerdo con esta moción. Según el periódico, durante la consulta aprobaron el texto según el cual esta exigencia sería percibida por la UE como una falta de solidaridad y estaría “en contradicción con el compromiso de Suiza con la paz en Ucrania”.
Sin embargo, en el Departamento Federal de Justicia y Policía se teme que el Consejo Nacional diga sí a la moción de Esther Friedli. Este emotivo asunto está en el orden del día del primer día de sesión. La mayoría dentro de la comisión asesora fue muy ajustada: sólo un voto adicional le permitió proponer el rechazo de la moción.
Esta tarde todas las miradas deberían estar puestas en el presidente del Centro, Gerhard Pfister. Hasta ahora siempre se ha posicionado claramente. Y declarar un día al periódico online náu:
“Si exigimos que sólo los ucranianos de los territorios ocupados puedan permanecer en Suiza, apoyamos un posible objetivo bélico de Rusia”
Sin embargo, varios representantes del centro ya votaron con la UDC en el Consejo de los Estados y se espera que también haya diferencias con la posición de Gerhard Pfister en el Consejo Nacional.
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Traducido del alemán por Anne Castella.