Una financiación de 415 millones de dólares del FMI permitirá a Marruecos fortalecer su resiliencia ante los desastres naturales, comprometerse con una economía más verde y continuar sus esfuerzos a favor de las energías renovables. Se trata también de mejorar la preparación de las autoridades ante los crecientes impactos climáticos.
Aunque no figura en la lista de países contaminantes, Marruecos apuesta decididamente por una política de transición ecológica potenciando las energías renovables. Y en esta transformación, el apoyo internacional es esencial.
Así, el consejo de administración del Fondo Monetario Internacional (FMI) acaba de aprobar el desembolso del segundo tramo de financiación a 18 meses que debería ayudar al Reino a fortalecerse frente a las catástrofes naturales y favorecer la financiación del desarrollo sostenible.
Con un importe total de 1.300 millones de dólares, esta financiación, aprobada en septiembre de 2023 en el marco del Mecanismo para la Resiliencia y la Sostenibilidad, debería ayudar a apoyar la transición de Marruecos hacia una economía más verde y contribuirá a reforzar su preparación y resiliencia frente a las catástrofes naturales, en particular los vinculados al cambio climático.
También ayudará a fortalecer la resiliencia de Marruecos frente a los peligros climáticos. El segundo tramo que acaba de aprobarse asciende a 415 millones de dólares. La institución de Bretton Woods acoge con satisfacción el firme y continuo compromiso de las autoridades marroquíes con una transición hacia una economía más verde.
Este nuevo financiamiento eleva el desembolso total bajo este programa a aproximadamente $747 millones. También ayudará a reforzar la preparación de las autoridades marroquíes ante las catástrofes naturales y a estimular la financiación para el desarrollo sostenible.
Cabe señalar que el Servicio de Resiliencia y Sostenibilidad del FMI consiste en financiamiento asequible y de largo plazo que permite a los países que participan en reformas reducir los riesgos para la estabilidad futura de su balanza de pagos, en particular los relacionados con el cambio climático y las pandemias.
Maryem Ouazzani / Inspiraciones ECO
Morocco