ADespués de la victoria de Donald Trump, Europa ya no puede contentarse con declaraciones de intenciones: debe recuperarse urgentemente y recuperar el control de los asuntos mundiales, sin hacerse ilusiones sobre lo que vendrá de Estados Unidos.
Sin embargo, el punto central es que es imposible afrontar los desafíos socioeconómicos, climáticos y geopolíticos que sacuden al planeta, mientras la Unión Europea (UE) tome sus decisiones por unanimidad de los veintisiete Estados miembros, lo que es lamentablemente ocurre actualmente con todas las decisiones importantes, en particular con todas aquellas que tienen un impacto presupuestario o financiero.
La única manera de salir del estancamiento es que un núcleo duro de países, encabezados por Francia y Alemania, presenten finalmente sobre la mesa propuestas concretas que nos permitan avanzar tanto a nivel presupuestario como institucional, sin esperar el acuerdo unánime de otros países. . Esta hipótesis de un núcleo duro que permita superar los bloqueos de la unanimidad ha sido mencionada muchas veces en el pasado, la más reciente en el informe Draghi que propone un plan de inversiones masivas a Europa.
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Hoy toca darle sustancia y avanzar de verdad. Para ello, se deben cumplir tres condiciones: hay que dotar a este núcleo duro de bases institucionales y democráticas sólidas; es esencial que Alemania se beneficie de ello, especialmente a nivel presupuestario, y no sólo Francia, Italia o España; es necesario que dentro de cada país, y a nivel europeo en su conjunto, varias visiones políticas, tanto de derecha como de izquierda, puedan encontrar material para expresarse y florecer.
Unión parlamentaria fortalecida
Empecemos por el primer punto. Para constituir un país con núcleo duro capaz de tomar importantes decisiones presupuestarias y financieras con toda la legitimidad democrática necesaria, es importante basarlo en un marco institucional y político sólido.
Lo más lógico sería partir de la Asamblea Parlamentaria Franco-Alemana (APFA), creada en 2019 en el marco de la renovación del tratado bilateral franco-alemán. La APFA, institución joven y poco conocida, compuesta por cien diputados de todos los grupos parlamentarios de la Asamblea Nacional y del Bundestag, se reúne entre dos y tres veces al año desde su creación y hasta ahora se ha limitado a una función principalmente consultiva.
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