Caroline reza allí todos los años desde hace 25 años. “Sólo voy allí una vez al año. No necesito mirar una tumba para pensar en ellas. Voy sistemáticamente unos días antes del día de Todos los Santos para limpiar las piedras y decorar las tumbas con flores. Quiero hacer Asegúrese de que se mantenga en buen estado”.
Una costumbre que este año se ha puesto patas arriba. Al cruzar las puertas del cementerio, con crisantemos en mano, se desploma. La tumba de su hermano ya no está allí. “No podía creer lo que veía, la tierra había sido removida, la piedra había desaparecido. Me eché a llorar”.
Por el momento, Caroline no se da cuenta.“Creo que me quedé quieto durante varios minutos con las flores en mis brazos. Me quedé petrificado”.
Es como si mi hermano pequeño muriera por segunda vez.
Cuando regresó a casa, se puso en contacto con el municipio. Después de varias llamadas telefónicas y largas explicaciones, Caroline se da cuenta del motivo de esta desaparición. “A mediados de 2023, recibí recordatorios para extender la concesión de mi hermano. Recibí varios de ellos. Los dejé en mis muebles sin mucha preocupación. Procrastiné el pago y luego lo olvidé. Este es el error de mi vida”.. PAG
Aproximadamente 18 meses después de la primera carta y sin respuesta, el municipio retiró la tumba. “Entiendo que la ciudad es normal, pero no estoy menos devastada. Me culparé por ello toda mi vida. Es como si mi hermano pequeño hubiera muerto por segunda vez”.
Por lo tanto, Caroline quiere testificar de forma anónima. “Hago esto para que nadie cometa el mismo error que yo. Fui descuidado. Es algo que nunca podré arreglar”. Para que esta situación no se repita, así funciona en caso de renovación de concesiones funerarias
“Es imposible pasar por alto los numerosos recordatorios enviados”
Caroline admite que recibió recordatorios y no les dio seguimiento. Estos recordatorios se envían sistemáticamente al concesionario cuando ésta llega a su fin, según un procedimiento impuesto por el Servicio Público Valón. “Al menos un año antes de la finalización de la concesión o de su renovación, el alcalde redacta un acta recordando que debe enviarse una solicitud de renovación antes de su vencimiento. Se envía una copia del acta al titular de la concesión o, si éste ha fallecido, a sus beneficiarios.”
Un contrato de alquiler de lo más clásico
“El municipio no se detendrá ante este planteamiento”, explica Xavier Deflorenne, jefe de la unidad funeraria del SPW Interior y Acción Social. “Un mes después de enviar el recordatorio, la información también se exhibirá en la tumba y en la entrada del cementerio”. El municipio mantendrá esta exhibición durante un año. “Normalmente, si se hace con inteligencia, debería abarcar dos días del Día de Todos los Santos. De esta manera, es imposible pasar por alto los numerosos recordatorios enviados. Según nuestras estadísticas, si nadie va a la tumba durante dos años, De todos modos, nunca seré visitado.”
Gracias a esta exhibición pública, cualquier persona interesada puede presentar una solicitud para renovar la concesión. Los vecinos, amigos y colegas pueden sentirse investidos con el deber de recordar. “Una vez vi a una persona renovar la tumba de su nodriza. Esta señora no tenía hijos y él sintió la necesidad de tenderle la mano por última vez”.
Una excepción puede prevalecer sobre este proceso. “Si la tumba no se mantiene, por ejemplo, si caen piedras o se acumula musgo, el municipio tiene derecho a tomar medidas. Pondrá un aviso en la tumba durante un año. Si después de un año nada cambia, la ciudad recuperará el lugar. Podemos comparar esto con un arrendamiento de alquiler más tradicional. Cuando tu inquilino no respeta el alquiler es normal que reaccione. En el caso de una concesión funeraria el principio es exactamente el mismo.
Precios y plazos que fluctúan
Si el procedimiento de retirada es estricto, la lista de precios y la duración de la renovación lo son mucho menos. Estos dos puntos los definen los municipios. Las tarifas son generalmente más altas en las ciudades más grandes. Namur, por ejemplo, ofrece concesiones a 25 años por un precio de hasta 850 euros. Leuze-en-Hainaut, un municipio más pequeño, ofrece un plazo de 30 años por 400 euros. El precio también puede aumentar si el difunto no residía en la región y si está enterrado en el suelo o en una bóveda.
Los municipios también pueden elegir la duración de la renovación. El servicio público valón simplemente impone una gama que debe respetarse. “Las concesiones se otorgan por un período mínimo de diez años y máximo de treinta años.”
Xavier Deflorenne destaca una excepción: “Las tumbas anteriores a 1945 están protegidas, por lo que estos plazos no siempre son aplicables si el municipio así lo desea. retirarse, deberá tomar medidas adicionales. El objetivo de esta medida es proteger las concesiones de veteranos o personajes históricos.”
Sin embargo, el SPW precisa que a pesar de estos plazos, a primera vista estrictos, mientras no se retire la tumba, los municipios deben ser magnánimos y tolerantes.