Después de ofrecer un enorme apoyo financiero a la campaña presidencial de Donald Trump, Elon Musk se convierte en el primero en ver su fortuna personal cruzar la barrera de los 400 mil millones. Mientras tanto, las acciones de Tesla alcanzaron un máximo histórico, añadiendo 556 mil millones de dólares a su capitalización de mercado, un aumento del 69%.
Apoyo estratégico a spin-offs lucrativos
Según documentos de la Comisión Federal Electoral, Elon Musk invirtió 277 millones de dólares en la campaña de Donald Trump. Aunque el presidente electo lleva mucho tiempo criticando los vehículos eléctricos, su alianza con Elon Musk podría transformar el panorama regulatorio. Algunos inversores ven la colaboración como una oportunidad para reducir las regulaciones e impulsar los negocios.
Las acciones de Tesla se disparan después de las elecciones
Tras la victoria de Donald Trump, las acciones de Tesla subieron hasta 429 dólares, antes de estabilizarse en 419,80 dólares, lo que supone un espectacular aumento del 69% desde las elecciones. Este repunte ha impulsado a Tesla a niveles no vistos desde finales de 2021.
Grandes empresas, como Goldman Sachs, Bank of America y Morgan Stanley, han elevado sus objetivos de precios para Tesla. Según Craig Irwin, analista de Roth MKM, “el apoyo genuino de Musk a Trump probablemente duplicó la base de entusiastas de Tesla y reforzó la credibilidad de la nueva demanda”. »
El robotaxi de Tesla | Foto de : Tesla
Influencia creciente en el gobierno
A cambio de su apoyo, Elon Musk codirigirá el nuevo Departamento de Eficacia Gubernamental, junto con Vivek Ramaswamy. Éste aconseja al presidente electo qué agencias racionalizar y qué normas eliminar, cambios que podrían beneficiar directamente a sus empresas.
Elon Musk también está haciendo campaña a favor de un proceso de aprobación federal para vehículos de conducción autónoma, actualmente gestionado a nivel estatal. Esta reforma podría acelerar la llegada de su proyecto estrella, el robotaxi Cybercab.
Un futuro moldeado por políticas favorables
Con su creciente influencia sobre las decisiones federales, Elon Musk se está posicionando para remodelar el mercado de vehículos eléctricos y tecnologías autónomas. Su alianza con el presidente electo podría marcar una nueva era, tanto para Tesla como para la industria automotriz.