Los resultados financieros del Ballet Béjart Lausanne (BBL) son negativos, según revela RTS el viernes. A principios de 2024, presentaban unas pérdidas de más de un millón de francos con un presupuesto operativo de unos 10 millones de francos. El ejercicio anterior, el 2022-2023, quedó justo en equilibrio con una pérdida de 288 francos. Recordemos que la mitad del presupuesto del BBL proviene de una subvención de la ciudad de Lausana y de los municipios circundantes.
La junta de la fundación adoptó recientemente un programa de saneamiento de tres años basado en una auditoría realizada por el Departamento de Control Financiero de la ciudad. Si aún no se ha hecho público el informe, la RTS afirma que se eliminará el cargo de director de infraestructuras, mientras que el exsecretario de Gil Román ha sido destituido. Además, “el profesor de baile y el pianista de la compañía ya no tendrán salario fijo, sino que serán contratados por turno y retribuidos por actuación”.
Según RTS, varios factores explican por qué BBL se encuentra en números rojos, en particular el hecho de que la empresa ya no cuenta con patrocinadores privados y que los costos de personal han aumentado.
La empresa fundada por Maurice Béjart atraviesa tormentas desde hace varios años. El sucesor del célebre coreógrafo, Gil Román, director artístico de la compañía, fue despedido el pasado mes de febrero. El director de producción fue despedido con efecto inmediato en octubre de 2021.
El viernes 28 de junio, el consejo de la fundación anunció el nombramiento de Julien Favreau para el cargo de director artístico del Béjart Ballet Lausanne. Bailarín durante treinta años en la BBL y solista en numerosos papeles destacados del repertorio de Maurice Béjart y Gil Roman, fue hasta ahora director artístico interino.
