Un error técnico ha llevado a que muchos propietarios reciban avisos de impuestos sobre viviendas desocupadas a pesar de que sus propiedades están ocupadas. La administración tributaria promete correcciones y alivios automáticos para los usuarios afectados.
Avisos fiscales incorrectos, una situación preocupante
Un golpe de calor para muchos contribuyentes franceses. Varios propietarios han recibido por error avisos del Impuesto sobre Viviendas Desocupadas (TLV) o del Impuesto sobre Viviendas Desocupadas (THLV), aunque sus propiedades están ocupadas.. Este error, revelado por Le Parisien, suscita preocupaciones sobre la gestión de los datos fiscales.
Según la CGT de Finanzas Públicas, casi dos tercios de las llamadas recibidas al servicio de impuestos personales este mes se refieren a este problema. Los errores parecen apuntar principalmente a inmuebles adquiridos recientemente, entre 2022 y 2023, o a viviendas que han cambiado de ocupación este año. Los propietarios que ocupan su residencia principal también se encuentran entre las víctimas de este error garrafal.
Ante esta situación, la Dirección General de Finanzas Públicas (DGFiP) admite un “error técnico” en el procesamiento de dictámenes y asegura que los casos identificados serán subsanados sin que los usuarios tengan que actuar.
El TLV y el THLV se refieren respectivamente a viviendas que han estado desocupadas durante al menos uno o dos años, según la zona geográfica. En 2024 se amplió la lista de municipios afectados por estos impuestos, quedando 3.697 municipios en zonas tensas y 6.417 fuera de zonas tensas. Esta ampliación explicaría en parte el aumento del número de dictámenes emitidos, a veces erróneamente.
¿Una ampliación mal controlada?
Para tranquilizar a los contribuyentes, la DGFiP anuncia que los usuarios interesados recibirán inicialmente un correo electrónico informativo seguido, a finales de año, de una carta cancelando el aviso inicial. Ya se han aplicado reducciones en algunas regiones: más de 350 casos en Tarn y 700 en Vienne, según cifras oficiales.
Esta situación también pone de relieve la complejidad para los propietarios a la hora de respetar sus obligaciones de declaración, en particular a través del servicio “Gestionar mi inmueble” en el sitio web de Hacienda. La administración tributaria recuerda que los cambios de ocupación deben declararse cada año, incluida la identidad de los inquilinos o la naturaleza del uso del alojamiento.
El incidente plantea dudas sobre la capacidad del departamento de impuestos para manejar el aumento de datos relacionados con los impuestos inmobiliarios. El Defensor de los Derechos ya había advertido de los riesgos relacionados con el uso de algoritmos en los servicios públicos. Si la DGFiP promete medidas correctoras rápidas, este episodio corre el riesgo de dejar huellas en la relación de confianza entre la administración y los usuarios.