¿Y si la producción de energías renovables, por muy virtuosa que sea, tuviera que afrontar una serie de paradojas? Ésta es la pregunta que bien podría plantearse hoy Bertrand Cardinal. El jueves 14 de noviembre, el presidente de la Cooperativa Ciudadana de Producción de Energía (Coopec), Aunis Atlantique, volvió al proyecto del parque fotovoltaico previsto en Grands Écluseaux, en Marans. El sitio es una antigua cantera de bri (arcilla) que se rellenó con desechos domésticos en la década de 1980, antes de cerrarse definitivamente.
Inadecuado para el cultivo y el pastoreo, el lugar se ha convertido paradójicamente en un verdadero santuario de biodiversidad, un remanso de paz para determinadas especies de reptiles y aves. “Tras los estudios de impacto ambiental, la superficie operativa fotovoltaica deberá pasar de poco más de 11 hectáreas a sólo 3. Este nuevo proyecto está dimensionado para producir entre 3 y 5 megavatios pico. A partir del 3 es viable”, explica Bertrand Cardinal. Quedan las medidas compensatorias y obligatorias que parecen dejar al alcalde de Marans, Jean-Marie Bodin, cuanto menos perplejo y pensativo: “Hemos delimitado seis hectáreas en la isla de Marans, detrás de las antiguas obras de Durand, hacia los jardines compartidos y el gallinero del gallinero Marans. Están previstos para que la biodiversidad de los Grands Écluseaux pueda trasladarse allí. »
Andilly desde el verano de 2025
El parque fotovoltaico de Marans no debería estar operativo antes de 2028, con un coste de construcción de entre 3 y 4 millones de euros. A diferencia del de Andilly, que debería empezar a producir energía a finales del verano de 2025. También está instalado en una antigua cantera y su coste se estima esta vez en un millón de euros.
“Pero esto es diferente, porque estamos en un pico de producción de menos de 1 megavatio. Por lo que no es necesario un estudio de impacto ambiental, sólo un diagnóstico. Sin embargo, deberá solicitar al prefecto una exención de los estudios de impacto ambiental. Dijo que estaba bien y firmó la orden”, continúa Bertrand Cardinal.
¿Y la energía eólica?
El 17 de mayo, el presidente de Coopec, las autoridades y funcionarios electos de la región inaugurarán el parque eólico de Andilly apoyado, entre otros, por Coopec Aunis Atlantique. Los tres aerogeneradores de este primer parque eólico ciudadano de Charente-Maritime, con una altura de 200 metros en el extremo de la pala, empezaron a girar en junio de este año. Pero después de poco más de medio año de funcionamiento, la cuestión es menos sencilla de lo que parece.
“Los primeros meses de funcionamiento no son significativos. Nos vemos obligados a detener frecuentemente la rotación de las tres turbinas eólicas, a riesgo de perder dinero. El precio de compra por parte de nuestro proveedor de servicios de la energía que produce se ha desplomado. Esto está claramente por debajo de lo previsto”, confiesa el presidente de Coopec Aunis Atlantique. Sin embargo, se muestra optimista sobre el futuro: “En 2025 firmaremos un contrato de venta a precio fijo de veinte años para la electricidad producida por las tres máquinas. »