El índice que mide esta actividad se sitúa en el 46,5%, frente al 47,2% de septiembre, según datos publicados por la federación profesional ISM.
La actividad manufacturera en Estados Unidos se deterioró más de lo esperado en octubre, y la demanda sigue siendo débil debido a las incertidumbres que están empujando a las empresas a suspender las inversiones, y algunas empresas también están preocupadas por las consecuencias de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
El índice que mide esta actividad se sitúa en el 46,5%, frente al 47,2% de septiembre, según datos publicados el viernes por la federación profesional ISM.
Un índice inferior al 50% significa que la actividad se ha deteriorado. Más allá de eso, sin embargo, está creciendo.
Los analistas esperaban un deterioro menos grave y vieron una recuperación del índice, hasta el 47,6%, según el consenso de Market Watch.
“La demanda sigue siendo débil, la producción ha disminuido”, comentó Timothy Fiore, jefe de la investigación, citado en el comunicado.
“Las empresas siguen mostrando renuencia a invertir en capital e inventario”, afirmó.
Cuatro días antes de un duelo particularmente reñido en la carrera por la Casa Blanca entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump, la encuesta del ISM precisa que las empresas encuestadas expresaron sus preocupaciones, entre otras cosas, sobre el impacto de los próximos resultados electorales en Estados Unidos.
Están preocupados por la “capacidad de la Reserva Federal de continuar recortando las tasas a la luz de las políticas fiscales expresadas por ambos partidos principales”.
Un directivo de un fabricante de equipos de transporte también informó de “incertidumbre sobre el resultado de las próximas elecciones (lo que) ha llevado a la preparación de varios estudios de análisis de riesgos”
Estos estudios están “particularmente centrados en el futuro de la migración de vehículos eléctricos y las restricciones (o) sanciones comerciales”, dijo.
De hecho, el expresidente y candidato republicano Donald Trump ha prometido revertir las inversiones de la administración Biden en el desarrollo de vehículos eléctricos. También quiere generalizar altos aranceles aduaneros para todas las importaciones.
Estados Unidos también sufrió en octubre varios frentes de ataque, especialmente en los puertos y en el fabricante de aviones Boeing, y fue azotado por dos grandes huracanes, Helene y Milton.
“Las huelgas portuarias, los huracanes y las elecciones nos afectarán a todos de una forma u otra”, comentó un directivo de una empresa papelera entrevistado para la investigación.
El banco central americano (Fed) ha comenzado a bajar estos tipos, lo que reduce el coste del crédito. Su próxima reunión será el miércoles y jueves y podría suponer un recorte de un cuarto de punto porcentual.
