En el tercer trimestre de 2024, el crecimiento de la economía francesa alcanzó el 0,4%, cifra superior a las previsiones de los analistas. Apoyada por la emoción de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París, Francia está registrando un notable aumento del consumo y de los servicios audiovisuales. Sin embargo, esta dinámica contrasta con una caída en ciertos sectores industriales y comerciales.
Un desempeño de crecimiento estimulado por los Juegos Olímpicos
Según los datos publicados por el INSEE este miércoles, Francia registró un crecimiento económico del 0,4% entre julio y septiembre de 2024superando las expectativas de los economistas, que anticipaban un aumento del 0,3%. Este repunte, tras un aumento del 0,2% en el segundo trimestre, se atribuye en gran medida a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, celebrados este verano en París.
El INSEE destaca que en el tercer trimestre se registraron ingresos por venta de entradas y derechos de retransmisión audiovisual asociados a este importante evento deportivo internacional, lo que fortaleció significativamente la economía nacional.
El impacto de los Juegos se siente especialmente en los servicios de mercado, cuya producción aumentó un 0,5% durante el período, estable en comparación con el trimestre anterior. Este dinamismo se ve impulsado por un fuerte repunte de los servicios domésticos (+3,5% tras una caída del 0,2% en el trimestre anterior), en particular gracias a los eventos deportivos.
Los sectores de la información y la comunicación, estimulados por los derechos de retransmisión olímpica, también registraron una aceleración (+2,3% tras +1,1%), resultado que refleja la fuerte demanda de contenidos audiovisuales relacionados con el evento.
Crece el consumo de los hogares
El consumo de los hogares también contribuyó a este crecimiento con un aumento del 0,5% tras el estancamiento del trimestre anterior. El INSEE precisa que este aumento se debe en parte al gasto en servicios recreativos y culturales asociados a los Juegos Olímpicos. El instituto de estadística explica que la demanda interna “está recuperando cierto impulso gracias al repunte del consumo de los hogares”, un signo alentador para la economía francesa.
Sin embargo, esta mejora general oculta ciertas dificultades persistentes en otros sectores. De hecho, la producción en el sector industrial sigue siendo frágil: la industria manufacturera muestra un ligero descenso (-0,1% después del -0,3%), en particular debido a la caída de la actividad en las refinerías (-0,8% después de un aumento del 3,4% en el trimestre anterior). El sector del alojamiento y la restauración también muestra signos de desaceleración (+0,2%, tras un +0,7%), al igual que los servicios de transporte (-0,6% tras un ligero aumento del 0,2%) y el comercio (-0,4% tras un -0,2%). .
A pesar de estos descensos, el INSEE confirmó sus previsiones de crecimiento trimestral de septiembre, manteniendo su estimación en el 0,4%. Esta cifra se ajusta a las expectativas ajustadas del instituto, que inicialmente había previsto un aumento del 0,5%. Estos resultados subrayan la importancia de eventos internacionales como los Juegos Olímpicos para estimular temporalmente la economía, pero también nos recuerdan la complejidad de mantener un crecimiento uniforme en todos los sectores de actividad.