La fábrica Mammoth, cuya función principal es absorber la contaminación del aire, entró en funcionamiento el miércoles en Islandia.
• Lea también: Estados Unidos invierte 1.200 millones de dólares en captura de CO2
• Lea también: Los vehículos eléctricos reducen significativamente las emisiones de CO2según un estudio americano
• Lea también: Calentamiento global: 70 países se comprometen a revisar formas de construir en el planeta
Así es la mayor infraestructura de captura de CO2 nunca construido. Esta “aspiradora de contaminación” fue construida por la empresa suiza Climeworks. Mammoth también es diez veces más imponente que su predecesor Orca.
Esta nueva tecnología aspira aire y extrae carbono mediante productos químicos. Luego, el carbono se envía a gran profundidad, se reutiliza o se transforma en materiales sólidos.
El objetivo de Climeworks es transportar carbono al subsuelo terrestre para que se transforme de forma natural en roca.
Mammoth tiene capacidad para extraer 36.000 toneladas de carbono, el equivalente a 7.800 coches produciendo CO2 en un año.
Tecnología controvertida
captura de CO2 está atrayendo cada vez más atención por parte de los líderes mundiales, pero sigue siendo una tecnología controvertida.
Varios detractores consideran que se trata de una técnica costosa, que consume mucha energía y cuya eficacia a gran escala no ha sido demostrada.
Sin embargo, actualmente se están construyendo proyectos incluso más grandes que Mammoth. Este es el caso de Stratos, una futura planta de captura de CO2 en Texas que podría eliminar 500.000 toneladas de carbono de la atmósfera por año.
Algunos de sus proyectos también están financiados por empresas petroleras a las que varios ecologistas acusan de invertir en esta tecnología únicamente para seguir extrayendo combustibles fósiles.