El ministro de Finanzas y Presupuesto, Cheikh Diba, aterrizó este jueves 9 de enero en París, informa una publicación. “Oficialmente, esta visita se califica de privada, pero entre bastidores parece tener un objetivo mucho más pragmático: encontrar ayuda presupuestaria para aliviar un tesoro nacional agotado. Este viaje ilustra los límites de un discurso de soberanía exhibido alto y claro por el gobierno senegalés”, añade el medio de comunicación Lu, que habla de una “ruptura declarada con Francia”.
“Desde su llegada al poder, el presidente Bassirou Diomaye Faye y su primer ministro Ousmane Sonko han multiplicado los gestos para romper con Francia, la antigua potencia colonial. Esta línea política desembocó en decisiones espectaculares: el anuncio de la retirada total de las tropas francesas a finales de 2025, el cuestionamiento del franco CFA y la voluntad de renegociar los contratos sobre los recursos naturales. En cada etapa, el gobierno ha insistido en un mensaje contundente: Senegal ahora pretende hacer valer su plena soberanía. En los discursos queda clara la ambición panafricanista y soberanista. Ousmane Sonko, figura destacada de esta orientación, no dudó en responder con dureza a los comentarios de Emmanuel Macron, calificando sus críticas de “arrogantes e infundadas”. Los símbolos de esta nueva doctrina abundan, pero hoy la realidad económica está desacelerando su impulso”. Además, un giro favorecido por “unas finanzas públicas en crisis porque el nivel de endeudamiento ha alcanzado proporciones alarmantes, con una deuda externa de más de 39 mil millones de dólares según estimaciones del Banco Mundial, la presión que ejerce esta deuda ha aumentado con el retraso acumulado en “La explotación de hidrocarburos, en particular el proyecto de gas Grand Tortue, se retrasó hasta finales de 2024 después de 28 meses de retraso”, informa el medio, que señala que “recurrir a París sigue siendo una necesidad”. Y “en este contexto, Cheikh Diba, ministro de Finanzas, tomó el avión con destino a París. Un movimiento que ilustra una sorprendente paradoja. Mientras Dakar aumenta los signos de distanciamiento de Francia, es precisamente en París donde el gobierno busca un soplo de oxígeno financiero. Los precedentes son numerosos: en 2012, Nicolas Sarkozy concedió una ayuda presupuestaria de 130 millones de euros al recién elegido Macky Sall. Más recientemente, todas las negociaciones del Club de París, foro clave para las cuestiones de deuda, tuvieron lugar en la capital francesa.
¿Espera Cheikh Diba reproducir estos precedentes? ¿Obtener ayuda presupuestaria directa? ¿O incluso convencer a París para que defienda la causa de Senegal ante las principales instituciones financieras internacionales? Cualesquiera que sean las opciones consideradas, este viaje demuestra que, a pesar de los rumores de ruptura, Francia sigue siendo un actor esencial en la ecuación financiera senegalesa. Son tantas las cuestiones que los medios consultados pusieron de relieve tras el viaje del ministro de Hacienda y Presupuesto a París este jueves. De hecho, indica que “el dúo Faye-Sonko ha hecho de la ruptura con Francia una norma política, pero los desafíos estructurales siguen siendo considerables. Porque Senegal no sólo debe hacer frente a una deuda aplastante, sino también acelerar la diversificación de su economía y restaurar la confianza de los inversores. Estas reformas, complejas y costosas, requieren recursos que el país está luchando por movilizar”.
Para saber más después de esta información, Dakaractu se puso en contacto con el Ministerio de Finanzas y Presupuesto. Esta información es falsa según una fuente del Ministerio de Hacienda y Presupuesto que informa, aunque se reserva cualquier otra información adicional, que “el Ministro de Hacienda y Presupuesto realizó un viaje en un ambiente estrictamente privado”. Además, nuestra fuente se sorprende de que tales informaciones puedan extraerse sin que se presente ningún marco que dé los contornos de esta “supuesta solicitud de apoyo presupuestario”. De hecho, incluso cuando se trata de un viaje del ministro en el sector de economía o de finanzas, éste está definido por un marco. Además, cada vez que un ministro realiza un viaje, detrás hay comunicación. A diferencia de un viaje privado en el que simplemente participa el interesado, recordó nuestro interlocutor del Ministerio de Hacienda y Presupuesto.