Hoy está prevista una audiencia pública sobre la explotación del circón en la zona de Niayes, que estará dirigida por funcionarios electos y estructuras de la sociedad civil para evaluar los posibles beneficios de esta mina explotada por Gco.
¿Se avecina una tormenta para Eramet Grande Côte (antes Gco)? Este sábado por la mañana se celebrará una importante audiencia pública en el Ayuntamiento de Diokoul Diawrigne, situado en el departamento de Tivaouane, sobre el tema: “La explotación del circón en la zona de Niayes por la empresa Gco del grupo Eramet ». Siendo el público objetivo todos aquellos impactados o potencialmente impactados directa e indirectamente por la explotación del zircón en los diferentes municipios de la zona de Niayes. En la reunión participarán varios actores, entre ellos parlamentarios como Guy Marius Sagna, Abdoulahat Ndiaye, Samba Diouf y Abdou Sonko, miembros de la sociedad civil y periodistas.
Los interrogantes que se abordarán girarán en torno a la explotación del zircón, disposiciones normativas y reglamentarias, las consecuencias sociales, económicas y ambientales que genera la explotación del zircón, su impacto en las comunidades y municipios, entre otros.
1.034 ha de terrenos rehabilitados devueltos al Estado, según Gco
Esta jornada se celebra luego de que Gco anunciara la devolución de tierras al Estado, luego de su explotación y rehabilitación. Esta reconstrucción sería una actividad poco común en la historia de la minería en la zona de Diogo. Una gran primicia lograda por Eramet Grande Côte (antes Gco), que se dedica a la explotación de arena mineralizada, en una zona a caballo entre las regiones de Thiès y Louga. Al devolver a las autoridades 85 hectáreas de terreno revegetado, el 8 de septiembre de 2022, respetando la preservación del medio ambiente y la biodiversidad. Otras 554 hectáreas rehabilitadas se utilizaron luego para establecer una infraestructura denominada “Oasis de Senegal”, para albergar los lugares turísticos afectados por el avance de la mina. En enero de 2025 está prevista la devolución al Estado de 395 ha de tierras rehabilitadas tras su explotación. Un total de 1.034 ha anunciadas por la empresa.
Durante una reciente visita de trabajo a los lugares de operación, el gobernador de la región de Thiès, Saër Ndao, afirmó haber constatado muchas dificultades en relación con la gestión de las comunidades, por lo que visitó las instalaciones para apreciar mejor la naturaleza. de los problemas planteados, vinculados a la gestión diaria en relación especialmente con los compromisos adquiridos, para un mejor entorno de vida, y también para ver las soluciones a proponer para mejorar el desarrollo de la empresa. El jefe del Ejecutivo regional reconoce que Gco ha logrado “enormes avances en la consecución de estos compromisos”, aunque, afirma, todavía quedan “cosas por completar”.
Además, el campus social Vcn de la Universidad Iba Der Thiam (Uidt) de Thiès acaba de inaugurar una moderna cancha de baloncesto. Para compensar su falta de infraestructuras deportivas, el Centro Regional de Universidades y Obras Sociales de Thiès (Crous-T) consideró necesario recurrir a las obras sociales de sus socios. Una convocatoria que tuvo respuesta favorable por parte de la empresa minera Eramet Grande Côte (antes Gco). La empresa minera, que forma parte del consejo de administración de Crous-T, ofreció una cancha de baloncesto a la Universidad Iba Der Thiam (Uidt) de Thiès, que pide colaboraciones para colmar la falta de infraestructuras deportivas.
Para el director general Frédéric Zanklan, el proyecto llevado a cabo en el marco de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) es el resultado de una colaboración a largo plazo entre la empresa minera y la Uidt. Surge de una necesidad expresada por los estudiantes de contar con un marco que les permita practicar deporte, fuera de las actividades educativas. El director de Crous-Thiès, Cheikh Mbacké Lô, magnificó el gesto durante la ceremonia de inauguración de la infraestructura. “Esta instalación es la primera infraestructura deportiva desde la creación del Crous-T hace seis años”, señala Lô. Señala que el actual campo de fútbol del campus sigue siendo inadecuado para una práctica óptima, de ahí la necesidad de un mayor apoyo para mejorar las condiciones deportivas de los estudiantes. Los estudiantes acogieron con satisfacción “este gesto de altísima importancia”, antes de formular otra queja relacionada con un campo de fútbol moderno.