Casi uno de cada cuatro suizos afirma que conduce después de haber bebido alcohol. Se trata de una tasa especialmente elevada en comparación con Europa, advierte el martes la Oficina de Prevención de Accidentes (bpa), que pide precaución a medida que se acercan las vacaciones.
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3 de diciembre de 2024 – 11:12
(Keystone-ATS) Según el estudio de la ESRA, realizado en 2023 en 39 países, 22 de ellos europeos, el 23% de los suizos afirma haber conducido al menos una vez después de consumir alcohol en los últimos 30 días, señala la bpa en un comunicado. En Europa, la tasa es sólo del 15%.
La encuesta BPA de 2023, realizada en colaboración con 14 policías cantonales, muestra que casi el 4% de los automovilistas conducen después de haber bebido alcohol y el 0,4% tiene un nivel de alcohol en sangre superior al límite legal del 0,5 por mil. Por la noche, esta tasa es aún mayor, con uno de cada siete conductores bajo los efectos del alcohol.
El año pasado, 31 personas murieron y 506 resultaron gravemente heridas en accidentes de tráfico relacionados con el alcohol. Así, el alcohol estuvo implicado en casi el 12% de los accidentes con lesiones corporales graves. La situación no ha mejorado en los últimos 10 años, lamenta el bpa.
Conductores jóvenes: los mejores
El organismo de prevención señala, sin embargo, que las medidas dirigidas a los conductores jóvenes parecen estar dando frutos. Los menores de 30 años muestran, en general, un comportamiento más responsable que los mayores, escribe.
A medida que se acercan las vacaciones de fin de año, la bpa recomienda dejar de beber alcohol antes de ponerse al volante o, si ha bebido, dejar allí el vehículo y regresar en taxi o transporte público. Recomienda compartir el vehículo, con un conductor designado de antemano que permanecerá sobrio.
En cualquier caso, se debe impedir que las personas que hayan estado bebiendo se pongan al volante. Se invita a los huéspedes a ofrecer bebidas sin alcohol.