Hace unos días tuvo lugar en Villeveyrac la primera feria de agricultura mediterránea, una gran granja al aire libre, organizada por la conurbación de Sète Agglopôle y el diario regional Midi Libre.
Un centenar de expositores repartidos en varios pueblos (viticultores, productores, artesanos, criadores, maquinaria agrícola, instituciones, formación, caza, pesca, apicultura, etc.) presentaron sus productos, novedades y conocimientos.
Con este motivo, dos cargos electos del municipio de Bessan, Matthieu Martinez, concejal municipal responsable de la biodiversidad y Philippe Marin, teniente de alcalde responsable de medio ambiente, desarrollo sostenible y energías, se reunieron con representantes de la unión nacional de la apicultura francesa y, en particular, con Christian Pons, Yael Serfaty y Gabriel Peña, este último responsable del sello Apcité concedido a municipios ejemplares.
Los debates en torno a la vida de la abeja, su conservación, la lucha contra los avispones asiáticos… fueron muy ricos.
Los funcionarios electos municipales pudieron presentar las acciones emprendidas a favor de las abejas, los polinizadores silvestres y la biodiversidad. La Unión de la Apicultura Francesa ha reconocido dos veces estas acciones concediendo la etiqueta Apiqué: una abeja en 2020 y dos abejas en 2022.
La ciudad de Bessan espera la tercera abeja. A seguir.
