Una persona murió y otras tres resultaron gravemente heridas en el incendio que se desató el lunes en una torre residencial de 27 pisos en Lieja, Bélgica, según un nuevo informe publicado el martes por la mañana por la policía.
Quince residentes de la Torre Kennedy tuvieron que ser transportados en avión durante una operación de rescate a gran escala en uno de los edificios de apartamentos más altos de Bélgica.
Se movilizaron un centenar de policías y unos 70 bomberos. Se desplegaron varios helicópteros para dejar a los bomberos en el tejado y evacuar a los residentes atrapados en los pisos superiores.
Según la policía, el incendio fue controlado durante la noche del lunes al martes. Sin embargo, los servicios de emergencia tuvieron que registrar algunos apartamentos para asegurarse de que no hubiera otras víctimas.
En la Torre Kennedy viven unas 260 personas, según un portavoz del alcalde de Lieja contactado por la AFP.
Unos doscientos de ellos se vieron afectados por la operación de evacuación y una decena seguían hospitalizados el martes por la mañana, entre ellos tres personas “en cuidados intensivos”, indicó un portavoz de la policía.
El incendio comenzó el lunes hacia las 14.00 horas (12.00 horas GMT) en los sótanos de la torre y se extendió por los pozos técnicos, provocando importantes emisiones de humo en las plantas superiores de este edificio construido en 1970.
En estos pisos, a los que las escaleras de los bomberos no podían acceder, los residentes se quedaron atrapados, sin poder salir por los ascensores ni por las escaleras.
Los servicios de emergencia les aconsejaron permanecer en sus balcones antes de las evacuaciones en helicóptero, que tuvieron lugar por la tarde.
Decenas de vecinos tuvieron que pasar la noche en hoteles o en un polideportivo de la ciudad valona.
Se abrió una investigación para determinar las causas del incendio, que aún se desconocían el martes por la mañana.
