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Friburgo se vistió de morado el viernes 14 de junio con motivo de la huelga feminista. La igualdad salarial y la lucha contra la transfobia fueron algunas de las reivindicaciones de las 4.000 personas que marcharon desde la plaza “Georgette-Pythonne”.
El colectivo detrás del evento califica esta edición como un éxito. © Thomas Delley
Publicado el 15/06/2024
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Friburgo se vistió ayer de morado al final de la jornada de huelga feminista. 4.000 personas marcharon entre la plaza “Georgette-Pythonne” y el bulevar de Pérolles, según el colectivo promotor de la manifestación, que esperaba una participación menor y por ello calificó esta edición de éxito. “No hay que lamentar ningún exceso y los participantes parecen contentos”, comentó al final de la velada Clarisse Nicaise, miembro del colectivo de huelga feminista de Friburgo.
Primera infancia: trabajos mal valorados y mal remunerados
El movimiento hizo campaña en particular por el fin de las desigualdades salariales, una mejor promoción del trabajo doméstico, educativo y de cuidados y contra la transfobia y la discriminación LGBTQIA+. Vestidos completamente de negro, los miembros de la asociación Fribourg Mille Sept Sans ilustraron el “duelo de la justicia” y quisieron denunciar las deficiencias en la atención a las víctimas de violencia sexual.
El fin del genocidio en Gaza y la liberación del pueblo palestino también formaron parte de las demandas de los manifestantes. “Como feministas interseccionalistas, abordamos también temas de actualidad como el de Palestina”, explica Clarisse Nicaise, quien precisa que el colectivo se opone “a todos los sistemas de dominación” y se sitúa “en las luchas de convergencia”.