Blanco fácil y gran botín, ese es el credo de estos equipos de ladrones que deambulan por los bonitos barrios. Una mujer, de 77 años, fue atacada y secuestrada por dos hombres en su domicilio este miércoles en París (6º distrito). Se llevaron un tesoro de 100.000 euros en billetes de banco y joyas preciosas.
Eran las 10:50 horas cuando la policía fue llamada a este alojamiento situado cerca de la estación de metro Notre-Dame-des-Champs. Las autoridades descubrieron a una jubilada en estado de shock que se había refugiado con su vecina. Ella dice que acaba de ser víctima de un “plan”, llevado a cabo por un equipo de estafadores que no dudaron en agredirla.
El martes por la tarde recibió una llamada telefónica de su banco. Bueno, eso es lo que ella piensa. Un extraño que se hace pasar por su asesor bancario le dice que es víctima de una estafa. Ella le informa de la próxima visita de un mensajero. Este repartidor tuvo que entregarle una nueva tarjeta bancaria, supuestamente para evitar más fraudes.
Pero al día siguiente, a las 9:50 horas, no fue un hombre, sino dos, los que se presentaron en la puerta del septuagenario, con un sobre que supuestamente contenía una nueva tarjeta. Cuando abre la puerta, la empujan violentamente hacia el interior del apartamento, la amordazan con cinta adhesiva y le atan las manos con un cinturón. Uno de los agresores amenaza con cortarle el dedo con un cuchillo. Por eso exigen acceso a la caja fuerte. Pero el jubilado no tiene ninguno.
Los matones registran el local y descubren una trampilla en el baño. En el interior consiguieron una suma de 50.000 euros en billetes de banco. Los ladrones también se llevaron joyas por valor de 50.000 euros y el teléfono móvil de la anciana.
Los investigadores del tercer distrito de la policía judicial son los encargados de llevar a cabo el resto de las investigaciones. Intentarán rastrear líneas telefónicas, imágenes de videovigilancia y huellas dactilares para identificar a los autores.