En la residencia de ancianos Puygibault, en Loches (Indre y Loira), los profesionales están aumentando el número de herramientas para apoyar mejor a los 175 residentes. Allí se practica especialmente la mediación animal. Pero dentro de unos meses un robot emocional interactivo estará presente en el establecimiento, informa La Nueva República.
Llamado Paro, este peluche con forma de foca fue presentado a los residentes el jueves 31 de octubre de 2024. Este robot está destinado a ayudar a las personas con trastornos cognitivos, en particular la enfermedad de Alzheimer.
“Otro apoyo, no medicinal”
Gracias a sensores presentes en su pelaje, sus ojos y sus bigotes, el robot reaccionará a las caricias y palabras de los residentes, interactuando con ellos. “El objetivo es proporcionar otro tipo de apoyo, no medicinal”, explicó a nuestros compañeros Stéphanie Berguer, facilitadora del establecimiento.
Durante su visita, el sello ya fue adoptado. “Lo pusimos sobre la mesa, la primera persona se le acercó. Le habló a Paro como lo haría con su perro que murió hace varios años. » A partir del primer trimestre de 2025, Paro estará presente todos los días de la semana. Este robot emocional cuesta 8.000 euros. Una suma que será cubierta por el Club Rotario de Loches.
de
France