El Knies Kinderzoo ofrece paseos en elefante a sus visitantes. Las organizaciones europeas y mundiales de zoológicos llevan varios años denunciando esta práctica, ya que es perjudicial para el bienestar de los animales y la seguridad pública. Knie promete poner fin a esto.
Sólo un zoológico en Suiza permite todavía el contacto entre su público y sus elefantes. En el zoológico infantil Knies en Rapperswil, grandes y pequeños pueden pasear a lomos de los paquidermos.
Pero esta actividad no sólo es criticada por las asociaciones defensoras de los animales, sino también por los propios zoológicos. Su asociación global (WAZA), con el que Knie está relacionado por su condición de miembro de la Asociación Alemana de Jardines Zoológicos (VdZ), desaprueba desde 2021 esta práctica “fundamentalmente en conflicto” con sus directrices sobre “mensajes de bienestar, conservación y seguridad animal”.
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El bienestar animal en cuestión
“El problema de los paseos en elefante es que los cuidadores tienen que utilizar métodos muy estrictos para controlar al animal. Su comportamiento debe ser seguro para los pasajeros”, explica Keith Lindsay, experto en elefantes.
En junio de 2023, por mandato de la Fundación Franz Weber, este biólogo conservacionista visitó los tres zoológicos suizos que albergan elefantes para evaluar sus condiciones de vida. En el zoológico de Knie, Keith Lindsay calificó los paseos en elefante como “muy pasados de moda”.
Keith Lindsay cree que los paseos en elefante requieren métodos de control agresivos y pueden causar sufrimiento físico. Entre ellos, los cuidadores de elefantes suelen utilizar un ankus (o “gancho”), un palo con un gancho de metal, diseñado para pinchar al animal y controlarlo.
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Knie también usa ankus. En los vídeos de paseos publicados en la cuenta de Instagram del zoológico de Rapperswil, los cuidadores sostienen uno en la mano. No vemos ningún contacto directo entre la herramienta y el elefante. Varias imágenes de archivo de RTS, hasta 1964, muestran paquidermos picados por estos instrumentos en el zoológico o en el circo Knie.
Cuando se le pregunta sobre su uso actual del ankus, Knie se limita a responder que lo abandonará en 2030, cambiando su método de cría.
Una práctica que va en contra de la corriente de otros zoológicos
Cada vez más zoológicos abandonan todo contacto con los elefantes. Este método, llamado “Contacto protegido”, fue adoptado por el Zoológico de Zúrich en 2014 y por el Zoológico de Basilea en 2017.
No más contacto directo entre el público y los animales. En cuanto a los cuidadores, ya no entran al recinto de los elefantes. Se acercan al animal desde el exterior, a través de rejas, y muchas veces le ofrecen comida o golosinas.
El contacto protegido también brinda al animal la oportunidad de desarrollar su propia estructura social y su propia jerarquía (…) comportamiento cercano a la naturaleza
“Por un lado, es por la seguridad de los cuidadores de animales, porque con los elefantes pueden producirse accidentes peligrosos. Y, por otro lado, el contacto protegido también da al animal la oportunidad de desarrollar su propia estructura social y jerarquía (…) un comportamiento cercano a la naturaleza”, explica Claudia Rudolf von Rohr, jefa del sector de conservación de especies y animales del zoológico de Zúrich.
“El guardián de los animales ya no forma parte de la jerarquía”, añade. “Antes, en contacto directo, los cuidadores todavía formaban parte de la manada. Por tanto, participaban en la estructura social”.
Y esta tendencia no es sólo suiza. Todos los miembros de la Asociación Europea de Zoológicos y Acuarios (EAZA) deberán pasar al “Contacto Protegido” para 2030.
Ya estamos en la fase de planificación para poder hacer las adecuaciones necesarias en términos de infraestructura y operación. Los animales se van acostumbrando de forma profesional y gradual al “contacto protegido”
Knie, que participa en su programa de cría (EEP), también seguirá este cambio de normas: “Ya estamos en la fase de planificación para hacer las adaptaciones necesarias en términos de infraestructura y operaciones. Los animales se rehabilitan de forma profesional y progresivamente hasta el “contacto protegido”, lo que nos permitirá cumplir en todos los aspectos con todas las directivas antes de 2030”, explica Sven Fässler, jefe del sector de animales, mantenimiento y limpieza del zoológico infantil de Knie. .
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Hacia el final de los paseos de Knie
La mayoría de los zoológicos, científicos y asociaciones con los que contactamos consideran que los paseos en elefante no son dignos de un zoológico “moderno”.
Knie dice que quiere cambiar su práctica. “La Asociación Mundial de Zoológicos y Acuarios (WAZA) tiene directrices claras que enfatizan el bienestar animal. Somos conscientes de que WAZA considera que montar en elefante es incompatible con sus principios. Por eso estamos en estrecho contacto con el Programa Europeo de Especies en Peligro (EEP) y ya estamos planeando poner fin a los paseos en elefante en nuestro zoológico”.
Mathilde Salamin y Mathias Deletroz