Philippe Böhlinger
INFORME – Inspirado en un concepto nacido al otro lado del Atlántico, en la prestigiosa Universidad MIT, un padre con espíritu creativo juguetea con las últimas innovaciones tecnológicas para mejorar la vida cotidiana de niños y adultos dependientes.
“Las personas con discapacidad suelen depender de una tercera persona en sus actividades diarias. Egoístamente, junto con mi esposa, fomentamos el aprendizaje de la autonomía desde muy temprano en la vida de nuestra hija. ¡Para ello las nuevas tecnologías son una herramienta fantástica!” Sandy Jecko es padre de una joven de 20 años que ha sufrido las secuelas de un tumor cerebral operado en su primera infancia. Tiene una discapacidad intelectual asociada a un retraso en la adquisición del lenguaje.
Cuando su hija cumplió 13 años, este ejecutivo sanitario, un geek de corazón, le construyó un apartamento de 30 metros cuadrados, anexo a la casa familiar, en el departamento de Mosa. Equipó el alojamiento con cámaras de vigilancia, persianas enrollables conectadas, sensores móviles para cerrar los grifos de agua, etc. El alojamiento evolucionó con el adolescente. El espacio “taller” se ha convertido recientemente en una cocina equipada. En el panel superior del horno,…
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