El presidente electo Donald Trump, condenado penalmente en Nueva York en primavera por pagos ocultos a una estrella del porno, pretende posponer el pronunciamiento de su sentencia previsto para el viernes, diez días antes de su toma de posesión, según un llamamiento hecho público el lunes.
• Lea también: ¿Las medidas emblemáticas de Trump adoptadas en abril?
• Lea también: Asunto Stormy Daniels: “No le va a pasar nada” a Donald Trump
• Lea también: Asunto Stormy Daniels: Donald Trump recibirá su sentencia diez días antes de su toma de posesión
Otra maniobra jurídica más: los abogados del que será el 47º presidente de Estados Unidos el 20 de enero exigen una “suspensión automática” del procedimiento.
Esto establece, según una orden del 3 de enero de un juez del Tribunal Penal de Manhattan, que la sentencia se anunciará en una audiencia el 10 de enero a las 9:30 am.
Es en esta fecha, muchas veces aplazada, cuando Trump debería, en principio, conocer su “sentencia”, incluso si el republicano, elegido el 5 de noviembre, no irá a priori a prisión.
“El tribunal debe cancelar la audiencia de sentencia programada para el 10 de enero de 2025 y suspender todos los plazos en este caso hasta que las apelaciones basadas en la inmunidad del presidente Trump se hayan agotado total y definitivamente, y el caso finalmente se abandone”, escriben los abogados Todd Blanche y Emil Bove en un recurso de apelación fechado el domingo.
Estos últimos fueron propuestos por Donald Trump para convertirse en los próximos números dos y tres del Departamento de Justicia.
El juez de Nueva York Juan Merchán, que presidió el juicio de “Stormy Daniels” en la primavera y pronunció la condena penal el 30 de mayo, tenía hasta el lunes a las 14.00 horas para dar su respuesta, según Mes Blanche y Bove.
En su defecto, “examinarán cualquier llamamiento de emergencia”.
El jefe de la Fiscalía de Manhattan, el fiscal Alvin Bragg, que investigó todo el caso, respondió en una orden que “el tribunal debe rechazar la solicitud del culpable y proceder a pronunciar la sentencia según lo previsto el 10 de enero”.
Tras seis semanas de juicio en plena campaña electoral, en un clima electrizante, Donald Trump se convirtió el 30 de mayo en el primer expresidente estadounidense (2017-2021) condenado penalmente.
El jurado popular del tribunal de Manhattan lo declaró culpable de 34 cargos por pagos ocultos de 130.000 dólares a la estrella porno Stormy Daniels, realizados justo antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2016.
No se le acusa de controles, sino de “falsificación contable agravada para ocultar un complot para pervertir las elecciones de 2016”, ganadas contra la demócrata Hillary Clinton.
Trump y su entorno han denunciado repetidamente una “mascarada”, una “caza de brujas” orquestada, según ellos, por el sistema de justicia de Nueva York y la administración demócrata del presidente Joe Biden.
Donald Trump no logró anular este veredicto histórico basándose en la inmunidad presidencial, un principio constitucional que el Tribunal Supremo de Estados Unidos había ampliado en gran medida el 1 de julio, en beneficio del ex y futuro presidente.