Cuando un dron del ejército israelí atravesó el cielo sobre su cabeza, Mahmoud Al-Madhoun, de 33 años, estaba a sólo tres cuadras del hospital Kamal-Adwan en Beit Lahya. Este sábado 30 de noviembre, a primera hora de la mañana, el fundador de la ONG Comedor Social Gaza transportaba verduras para los pacientes de este centro de atención, uno de los últimos que aún funcionan en el norte de la Franja de Gaza. En el camino, los disparos de la maquinaria militar no dejaron ninguna posibilidad a este padre de siete hijos, cuya pequeña, Aline, había nacido dos semanas antes.
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« Intenté salvarlo llevándolo al hospital en un carro, con los vecinos, “, dice vía WhatsApp Abu Tamer, de 41 años, el asistente del treintañero, que estaba a unos diez metros delante de él: Israel todavía prohíbe a los periodistas entrar en la Franja de Gaza. Pero fue imposible. » Además de sus gravísimas heridas, Mahmoud Al-Madhoun no pudo ser trasladado debido a que varios francotiradores del ejército israelí comenzaron a disparar en los alrededores del centro de salud, afirma el humanitario. Unos treinta minutos después del ataque con misiles, Abu Tamer decidió enterrar a su amigo ese mismo día. al lado de una calle », en un ataúd improvisado.
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