Un servicio comunitario fue solicitado el viernes ante el tribunal de Marsella, en el sureste de Francia, contra tres estudiantes acusados de haber masticado un ratón vivo hasta matarlo, filmando la escena que luego retransmitieron.
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Los hechos se remontan a septiembre de 2023, durante una velada de integración en el instituto Thiers, un establecimiento público de élite de la segunda ciudad de Francia.
En un vídeo que circuló en las redes sociales, se ve a Lucas B., entonces estudiante de segundo año de la clase preparatoria de ciencias, masticando un ratón antes de escupirlo y volver a llevárselo a la boca, hasta matarlo.
“No tengo memoria”, repitió Lucas B., ahora en la escuela de ingeniería, durante el juicio del viernes. Con 1,75 gramos de alcohol por litro de aire exhalado en el momento de los hechos, el acusado logró llegar a un hospital tras matar al roedor para realizar “controles higiénicos”.
El fiscal solicitó en su contra 105 horas de servicios comunitarios y una multa por incumplimiento.
La escena fue filmada por Cédric V. y luego el vídeo fue transmitido a Léo A., quien es acusado de haberlo difundido en Instagram como una “historia privada”. Ambos estuvieron ausentes de la audiencia del viernes.
El fiscal, que considera que participaron en este maltrato animal, solicitó 80 horas de TIG contra Cédric V. y 60 horas contra Léo A., así como multas en caso de incumplimiento.
Trece asociaciones civiles, entre ellas la Fundación 30 Millones de Amigos y la Sociedad para la Protección de los Animales (SPA), solicitaron una indemnización de varias decenas de miles de euros. Denunciaron los “actos de crueldad y barbarie” cometidos por los estudiantes.
“Necesitamos trabajar en interés general dentro de una asociación de defensa de los animales para comprender que todos los seres vivos merecen respeto”, afirmó Xavier Bacquet, en representación de la Fundación 30 millones de amigos.
Los abogados defensores pidieron que las sentencias no se registraran en los antecedentes penales, so pena de “privar a los estudiantes de cualquier horizonte profesional”, según Me Dahan, abogado de Cédric V.
