La hija de un rico ejecutivo de negocios mostró un coraje notable al negarse a abrir una caja fuerte para dos ladrones armados durante una aterradora redada en su casa de Sandbanks.
Esta es una historia reportada por el medio británico Daily Mail. Un violento ataque armado en la casa de la familia Aitchison ha sacudido la pacífica comunidad de Sandbanks. Emily Aitchison y su madre, Kerry, sufrieron una aterradora agresión por parte de Ashley Fulton y un cómplice, haciéndose pasar por policías para irrumpir en su casa.
Redada a punta de pistola
Ashley Fulton, de 42 años, y un cómplice irrumpieron en la casa familiar en febrero de 2023, mientras Kerry, fisioterapeuta y entrenador personal de 55 años, estaba sola. Los delincuentes la ataron de pies y manos y la amenazaron. Cuando llegó su hija Emily, los atacantes la maltrataron, la arrastraron por el cabello y la amenazaron con quemarle la piel con una plancha. También dijeron que matarían a su madre si se negaba a darles el código de la caja fuerte familiar.
Valientemente, Emily se negó a obedecer, e incluso ingresó códigos falsos para engañar a los delincuentes, diciéndoles que un tercer intento activaría una alarma. Esta estratagema provocó que los ladrones entraran en pánico y huyeran. Sin embargo, antes de abandonar el lugar, se encargaron de saquear la propiedad y se llevaron objetos valiosos por valor de más de 200.000 libras esterlinas.
Las pistas dejadas conducen a los investigadores hacia los culpables.
A pesar de su fuga, Fulton y su cómplice dejaron muchas pruebas, lo que facilitó el trabajo de la policía. Su ADN se encontró en toda la casa y las cámaras de seguridad capturaron su vehículo de fuga, registrado a nombre de Fulton. Los registros telefónicos también revelaron que Fulton buscó en línea el raro reloj Patek Philippe que robaron.
Una condena por delitos violentos
El Tribunal de la Corona de Bournemouth condenó a Ashley Fulton a cadena perpetua, con un período mínimo de nueve años antes de una posible apelación de la libertad condicional. El juez William Mousley caracterizó a Fulton como peligroso para el publicorecordando su amplio historial y su diagnóstico de trastorno de personalidad.
Consecuencias duraderas para la familia Aitchison
Kerry Aitchison describió las secuelas psicológicas de esta intrusión, explicando que su hogar, que alguna vez fue un refugio, se convirtió para ella en un lugar de trauma. Su hija Emily sufrió ataques de ansiedad y tuvo dificultades para volver a trabajar. Durante la sentencia, el juez expresó su apoyo a la familia, esperando que algún día puedan pasar página. Además de Fulton, su cómplice fue condenado a 16 años de prisión y la novia de Fulton, Lacey Langton, fue condenada a 14 meses por intentar ocultar pruebas.
atraco en el reino unido